Podemos fue la formación que más rentabilidad sacó al dinero dedicado a gastos electorales en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, ya que cada uno de sus 42 diputados tuvo un 'coste' de 52.000 euros, mientras que el PP registró los parlamentarios 'más caros': 99.000 euros por escaño, según datos del Tribunal de Cuentas.

Muy cerca de los 'populares' se situaron PSOE y Ciudadanos con casi 98.000 y 90.000 euros por diputado, respectivamente, cifra que se obtiene si se relacionan los gastos electorales de cada partido con los resultados obtenidos en los comicios.

Así, el PP gastó en la campaña electoral 12,2 millones de euros y obtuvo 123 diputados por lo que cada escaño tuvo un 'coste' electoral de 99.187 euros. A su vez, el PSOE dedicó 8,8 millones y sacó 90 escaños, con lo que cada uno costó 97.778 euros.

En cuanto a Ciudadanos, destinó a la campaña electoral unos 3,6 millones de euros y obtuvo 40 diputados, lo que supone un coste por escaño de 90.000 euros, mientras Podemos gastó cerca de 2,2 millones y sacó 42 parlamentarios, lo que supone un coste de 52.381 euros por escaño, según los cálculos de OTR/Press.

Publicidad y propaganda, grueso de los gastos

Los cuatro partidos principales dedicaron el grueso de sus gastos electorales en los comicios generales del pasado 20 de diciembre a difundir publicidad y propaganda en las calles y en los medios de comunicación, aunque con importantes diferencias entre las cifras del PP y el PSOE, por un lado, y las de Ciudadanos y Podemos, por otro.

Mientras que el PP destinó 5,28 millones de euros a publicidad, propaganda y relaciones públicas, los socialistas dedicaron a esa partida 5,25 millones, según consta en los datos que los distintos partidos han tenido que entregar al Tribunal de Cuentas sobre los gastos en ingresos justificados de las elecciones del 20-D, consultados por Europa Press.

Ciudadanos y Podemos, en cambio, se quedan muy lejos de esas cifras. La formación naranja dedicó 1,5 millones de euros a distintos conceptos que se podrían englobar como publicidad y propaganda en distintos medios y soportes, y Podemos gastó en ello algo más de 900.000 euros.

Los partidos que más dinero dedicaron a publicidad y propaganda son, lógicamente, los que tuvieron el presupuesto de campaña más alto: el PP, que gastó en total 12,2 millones de euros, y el PSOE, con 8,8 millones, en ambos casos sin contar con el envío postal de propaganda electoral subvencionado por el Estado ('mailing').

Tanto el presupuesto de C's como el del partido liderado por Pablo Iglesias fueron mucho más modestos, unos 3,6 millones de euros el primero y cerca de 2,2 millones el segundo.

Si se calcula el porcentaje que representan la publicidad y la propaganda para cada una de las formaciones, en el caso del PP, Podemos y Ciudadanos es algo más del 40% del total, mientras que para el PSOE supone bastante más, el 60% de su presupuesto.

El PP gastó 2,5 millones en publicidad exterior

El PP se gastó un total de 12,22 millones de euros en la campaña para las elecciones del 20 de diciembre, unos gastos ordinarios en los que la partida relativa a publicidad, propaganda y relaciones públicas es una de las más elevadas, ya que asciende a 5,28 millones.

De esos 12,22 millones, dedicó 12,02 millones a servicios exteriores, 152.000 euros a gastos financieros ordinarios y 49.000 euros a gastos de personal no permanente.

El grueso del gasto se condensa en el capítulo de servicios exteriores, donde se incluyen arrendamientos (650.000 euros); servicios profesionales independientes (1,6 millones); transportes (190.000 euros); primas de seguros (17.000 euros); servicios bancarios y similares (55.000 euros); publicidad, propaganda y relaciones públicas (5,28 millones); y otros servicios y suministros (4,16 millones).

El apartado de 5,28 millones de publicidad y propaganda, el PP lo desglosa así: 2,2 millones para publicidad en prensa y radio, 2,5 millones para publicidad exterior y 566.601 euros para otra propaganda y publicidad. Para las elecciones generales del 26 de junio, el PP se ha comprometido a eliminar toda la publicidad exterior estática que aparece en vallas y banderolas.

PSOE gastó lo mismo en medios que en publicidad exterior

El PSOE, por su parte, se gastó un total de 8,65 millones de euros en gastos electorales ordinarios, de los que 5,25 millones fueron destinados a publicidad, propaganda y relaciones públicas, y tuvo unos gastos financieros de unos 212.000 euros.

Antes de que comenzara la campaña, los socialistas aseguraron que su presupuesto era un 30% menor que el de las elecciones de noviembre de 2011, el mismo porcentaje de recorte que quieren aplicar ahora.

Dentro de los gastos electorales ordinarios, no figuran gastos de personal no permanente, tan solo la partida de servicios exteriores. En esta se incluyen 83.500 euros para arrendamientos y 6.000 para transporte, el grueso de 5,25 millones en publicidad, propaganda y relaciones públicas y otros 3,3 millones en "otros servicios" que no se detallan.

Sí se explica el gasto en publicidad y propaganda: 1,99 millones en publicidad en prensa y radio, 2 millones en publicidad exterior y 1,24 millones para "otra propaganda y publicidad dirigida a promover el voto".

Podemos y Ciudadanos, los más austeros

Las cuentas de Podemos, que no tuvo gastos financieros, indican que sus gastos electorales ordinarios ascendieron a 2,22 millones de euros, dentro de los cuales hay una partida de 163.000 euros para gastos de personal no permanente y otra de 2 millones de euros para servicios exteriores. De esta última, la mayor parte (casi 915.000 euros) corresponde a publicidad, propaganda y relaciones públicas.

En esa misma categoría destacan los pagos de servicios de profesionales (más de 480.000 euros) y los arrendamientos (330.000), además de 327.000 euros que se emplearon en "otros servicios", aunque la formación morada no especifica cuáles. También figuran gastos en transportes, servicios bancarios y primas de seguros, aunque ninguna de estas partidas supera los 2.000 euros.

Por último, Ciudadanos empleó 3,63 millones de euros en su campaña para los comicios del 20-D, y la mayor parte -casi un millón- sirvió para pagar "servicios integrales" de los actos electorales. A eso hay que añadir 300.000 euros en gastos de logística, 220.000 en seguridad, cerca de 145.000 en viajes, 82.000 en alquileres y 9.000 euros en la contratación de fotógrafos.

A propaganda y publicidad exterior y en medios de comunicación destinaron aproximadamente 1,5 millones de euros si se suman las partidas de publicidad en medios (633.000 euros), publicidad estática (325.000), octavillas y carteles (300.000), imagen y diseño (casi 130.000), vídeos, 'merchandising' e imagen corporativa (155.000 euros entre los tres).

Las cuentas se completan con 102.000 euros en estudios, 110.000 en servicios bancarios, 40.000 euros en asesoría y 22.000 en "otros servicios", según detalla Ciudadanos, que de cara a las elecciones generales de junio quiere reducir su presupuesto de campaña en entre un 10% y un 15%.

Aparte de estas cifras, el PP empleó 5,79 millones de euros en el 'mailing', el PSOE dedicó 4,86 millones a estos envíos electorales; Ciudadanos, algo más de 2,4 millones; y Podemos, 587.000 euros.