El número de redes sociales que existen en la actualidad es muy amplio y las hay de todo tipo: para compartir nuestras fotos y vídeos, para conocer a gente, informarnos e informar; las hay de música y de deportes, entre otros; pero también las hay dedicadas al empleo. El caso de Linkedin es particular, "no es solo una plataforma para buscar trabajo", puntualizaba esta semana Amel Fernández, experto en estrategia en redes sociales, quien destacó que la red social profesional más grande del mundo "nos permite aprender, crear sinergias y ampliar oportunidades laborales, es decir, crecer profesionalemte".

El también consultor y director del Instituto de Transformación digital, ha sido el protagonista del 25 Foro Business DMallorca que se celebró esta semana en el Club de este rotativo y que contó con el patrocinio de Banco Sabadell, Deloitte y Endesa y con la colaboración de Aico, Kare, Mater y Trends. Gracias a su conferencia 'Claves para destacar en Linkedin', Fernández fue capaz de conseguir que hasta dos asistentes a la ponencia, ninguno de los cuales tenía un perfil en la red social, lograran posicionarse correctamente en la plataforma.

Solo uno de cada cuatro usuarios de esta plataforma es realmente activo, explicó Fernández, "os invito a que cambiemos eso. A que usemos Linkedin para obtener resultados tangibles". Así empezó lo que en poco más de una hora se convirtió en todo un experimento. El director del Social Media Camp quería demostrar que aplicando una serie de estrategias era posible mejorar el posicionamiento en la red social. Y lo consiguió.

Fernández destacó cuatro claves importantes para lograr destacar en la plataforma profesional y conseguir uno de los objetivos más importantes: "Que nuestro nombre aparezca cuando no nos busquen". ¿Cómo conseguirlo?

La especialización laboral es el motor de las búsquedas en Linkedin, por ello la primera clave que hay que tener en cuenta para destacar entre millones de personas es incluir la especialidad laboral en el perfil personal. "Tiene que ser lo más concreto posible", apuntó Fernández, ya que dependiendo de las palabras que utilicemos, serán unas empresas u otras las que encontrarán un determinado perfil, es por ello que "debemos tener en cuenta que nuestra especialidad no solo sea aquello que hacemos bien, sino aquello que están buscando aquellos que queremos que nos encuentren", explicó.

Además, aseguró que cuanto más específica sea la especialidad que el usuario destaca y cuantas menos palabras incluya, mejor. "Hay que ser más realistas, tenemos que usar especialidades que busque la gente", insistió. En este sentido, al acceder a la sección de empleo de Linkedin se puede comprobar que cuanto más acotada es la búsqueda, mayor es el número de ofertas de empleo que aparecen. "Cuantas más ofertas hay, más headhunters habrá interesados", especificó, entendiendo por headhunter a aquella persona que busca trabajadores con un perfil muy concreto. Lo que significa que las oportunidades de trabajo pueden incrementarse de forma notable en esta red social con tan solo cambiar una palabra.

Otra de las claves que el experto en estrategia en redes sociales resaltó pone en evidencia un error en el motor de búsqueda de Linkedin. Se trata de insertar la especialidad profesional dentro del campo 'apellidos' que se solicita al crear el perfil en la plataforma. De esta forma, cuando se realiza una búsqueda, la especialidad aparece junto con el nombre del usuario, lo que incrementa la posibilidad de aparecer en las diferentes búsquedas. "Es un fallo interno de Linkedin, una brecha, pero se puede hacer y funciona", argumentó.

Máximo 30 veces

Directamente relacionado con ello, destacó la tercera estrategia que puede mejorar el posicionamiento en esta plataforma de empleo, se trata de incluir la especialidad laboral en el titular profesional que se exige a cada perfil.

Fernández señaló, además, que insertar la especialidad que mejor define al usuario profesionalmente dentro de la URL (dirección web) de Linkedin es fundamental, pues cada perfil personal profesional tiene una dirección web asignada. Esta modificación "tiene una potencia de posicionamiento interno brutal", reafirmó.

Como bien destacó, al realizar este cambio "se está editando la dirección web que se encuentra dentro del dominido de Linkedin, lo que supone posicionarse en Google". Esto implica que al introducir en el buscador la especialidad que el usuario ha elegido, puede que aparezca su perfil y por lo tanto las posibilidades de que le encuentren las empresas aumentan considerablemente.

Finalmente, el director del Social Media Camp señaló la importancia de que la denominación de la especialidad no varíe, "porque si la cambiamos limitaremos las opciones que tenemos".

Todas estas claves para mejorar el posicionamiento del perfil en esta red social pueden hacer pensar que cuantas más veces se incluya la especialidad en el perfil, más fácil será destacar entre los demás. Incorrecto, hay que ser cuidadosos con este aspecto, ya que si el usuario supera las treinta repeticiones dentro del perfil "es posible que Linkedin entienda que estamos haciendo trampas y nos penalice", advirtió Fernández.

Tan solo poniendo estas claves en práctica, el experto en estrategia en redes sociales logró que su experimento funcionase: al introducir la especialidad de uno de los asistentes a la conferencia en Linkedin, apareció en el primer puesto de la búsqueda.

A partir de aquí, Fernández explicó que era necesario ponerse como meta aumentar las visitas al perfil profesional, las apariciones en búsquedas, realizar actualizaciones, tener en cuenta el volumen de contactos útiles y aumentar el Social Selling Index (SSI), que se trata de un ranking de perfiles según el cual Linkedin otorga una puntacuión de 0 a 100. El SSI mide la eficacia de los perfiles y es "un factor decisivo para aparecer en motores de búsqueda, es decir, cuanto más SSI tengamos, más posibilidades tendremos para aparecer", especificó.

El estigma

¿Solo deben formar parte de esta plataforma laboral aquellas personas que carecen de empleo? Según Fernández este es uno de los estigmas que recaen sobre Linkedin. "Se piensa que si un trabajador tiene perfil es que no está contento con su empleo y no es así", señaló, para después aconsejar a los usuarios de la plataforma que muestren que "no son empleados desagradecidos, sino que se pueden convertir en embajadores de la marca de la empresa para la que trabajan".