Ateniéndonos a la variable tiempo, podemos pensar que la sucesión premeditada y organizada es un contratiempo, puesto que se trata de promover un cambio antes de que las circunstancias nos obliguen a ello.
Para ayudar a los padres que están viviendo este momento, que puede durar años, lleno de dudas, les propongo que incorporen a sus reflexiones estos diez pensamientos:
- Preparar con antelación y acierto el relevo generacional, sin muchas prisas para evitar momentos críticos
- No tener miedo a perder el poder
- No sentir terror a considerarse viejo
- Evitar el pánico a no sentirse indispensable
- Superar la angustia cuando se sabe qué hacer
- Analizar las capacidades del sucesor para confirmar sus aptitudes y actitudes
- Escoger al sucesor que demuestre: su carácter de emprendedor equilibrado, su vocación profesional y su interés por la empresa.
- Prepararse para desarrollar sus habilidades y formándose en sus capacidades intelectuales
Llegado el momento, le recomiendo:
- Conviértase en su tutor.
- Hable mucho con sinceridad y cordialidad.
- Indague su personalidad para educarla.
- Indague su vocación para potenciarla.
- Concrete su plan de estudios profesionales
- Concrete su plan de carrera profesional.
- Ayúdele a ser el futuro líder de la familia.
- Ayúdele a ser el futuro líder de la empresa.
- Incúlquele los valores de la familia.
- Entrénelo en las tareas de dirección y de emprendedor.
Le invito a que reflexione con estas frases:
Para conseguir mantener unida y en armonía la familia, es preciso definir y compartir los valores que cada uno de sus miembros viva y transmita con convencimiento.
Mantener unida a la familia y prosperar en la empresa para poder transferirla con garantías a las próximas generaciones es el reto.
No olvide nunca que compartir valores de forma tolerante, ayuda a convivir y que no compartirlos o querer imponerlos ayuda a dividir.
No olvide que dirigir también es provocar cambios y que la gran causa de la crisis radica en alejarse de las demandas de los clientes.