El Consejo de Ministros aprobará este martes el anteproyecto de ley para la jornada de 37,5 horas

El Consejo de Ministros dará luz verde este martes al anteproyecto de ley que reduce la jornada laboral a 37,5 horas semanales sin afectar al salario. Esta medida, fruto del acuerdo entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos CCOO y UGT, llega tras un año de debate en el diálogo social y después de superar las diferencias con el Ministerio de Economía.

Una reforma sin apoyo de la patronal

El acuerdo, firmado en diciembre, no contó con el respaldo de las organizaciones empresariales CEOE y Cepyme, que consideran que la jornada laboral debe regularse mediante negociación colectiva. La reducción de jornada es una de las principales promesas de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y beneficiará a unos 12 millones de trabajadores.

Tras la aprobación gubernamental, el texto pasará por el Consejo de Estado y el Consejo Económico y Social antes de regresar al Consejo de Ministros como proyecto de ley, previsiblemente a finales de febrero. Posteriormente, será debatido en el Congreso, donde podrá recibir enmiendas antes de su aprobación definitiva.

Trabajo espera que la ley se publique en el BOE antes del verano, permitiendo a las empresas adaptarse a la nueva jornada. Los convenios colectivos que superen las 37,5 horas semanales tendrán hasta el 31 de diciembre de 2025 para ajustarse al nuevo límite.

Impacto en los contratos y derechos laborales

El anteproyecto establece que los contratos a tiempo parcial con una jornada igual o superior a 37,5 horas semanales se convertirán automáticamente en contratos a tiempo completo. Los trabajadores con jornadas inferiores mantendrán su carga horaria y verán ajustado su salario de forma proporcional.

Las personas con reducciones de jornada por cuidado de menores, familiares o en situación de violencia de género mantendrán sus condiciones actuales hasta el 31 de diciembre de 2026 o podrán adaptarse al nuevo régimen.

Además, el Gobierno se compromete a revisar en un plazo de 18 meses la normativa sobre jornadas especiales para adecuarlas a la nueva legislación.

Sanciones más duras para empresas incumplidoras

Las empresas que no respeten la nueva jornada laboral o el registro horario podrán enfrentarse a multas de hasta 10.000 euros por trabajador. Esta reforma endurece las sanciones, que actualmente llegan a un máximo de 7.500 euros y se aplican de manera global.

Las infracciones se clasificarán en tres niveles:

• Leves: multas de 1.000 a 2.000 euros.
• Medias: entre 2.001 y 5.000 euros.
• Graves: de 5.001 a 10.000 euros.

Registro horario digital y derecho a la desconexión

Para evitar fraudes en el registro de jornada, la norma exige un sistema digital accesible para trabajadores, representantes sindicales e Inspección de Trabajo. La empresa deberá proporcionar mensualmente un resumen de las horas trabajadas y remuneradas.

Los registros deberán diferenciar entre horas ordinarias, extraordinarias y complementarias, y serán los propios empleados quienes los cumplimenten. En caso de incumplimiento, se presumirá que los contratos a tiempo parcial son a jornada completa.

Asimismo, el texto refuerza el derecho a la desconexión digital, considerándolo irrenunciable. Esto significa que ningún trabajador podrá ser sancionado por no atender comunicaciones fuera de su horario laboral.