Pacto de estabilidad

El Ecofin espera cerrar la reforma de las reglas fiscales antes de finales de 2023

La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, asegura que será un expediente "prioritario" bajo la presidencia española de la UE durante la segunda mitad del año

Nadia Calviño.

Nadia Calviño.

Silvia Martínez

La Comisión Europea ya tiene el camino despejado para presentar en las próximas semanas la propuesta legislativa con la que reformar las reglas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) han cerrado este martes un acuerdo sobre los principios generales de la revisión -se espera que los líderes den su aval en la cumbre de finales de la próxima semana- que introducirá más flexibilidad para reducir la deuda pública y sendas de reducción a medida. Los Veintisiete quieren un acuerdo antes de finales de 2023, durante la presidencia española de la UE. “Será un expediente prioritario para la presidencia española”, ha indicado al término de la reunión la vicepresidenta primera y ministra de economía, Nadia Calviño.

El texto de conclusiones llegaba cerrado a la discusión y con el aval previo de las 27 delegaciones pero de nuevo en el último minuto, como ocurriera con el acuerdo para poner fin a los motores de combustión en 2035, el ministro alemán de finanzas, Christian Lindner, ha planteado problemas y ha obligado a retocar el documento para incluir una referencia a que, antes de publicar sus propuestas legislativas, se pide a la Comisión Europea que “tenga en cuenta los puntos de vista convergentes de los Estados miembros y siga colaborando con los Estados miembros en los ámbitos señalados para debates adicionales”.

“Ha quedado claro en los debates de los últimos días que algunos, o para ser más precisos un número considerable de Estados miembros, están preocupados de que sus comentarios y consideraciones y su situación particular no se tengan debidamente en cuenta”, ha justificado Lindner que ha avisado de que “todavía queda trabajo por hacer en los detalles” para resolver las “cuestiones abiertas que preocupan a los Estados”. Entre los elementos que sustancia división, según queda reflejado en las conclusiones, "la definición de la trayectoria de la Comisión, los requisitos para los Estados miembros que se considere que tienen problemas de endeudamiento bajo, posiblemente incluyendo una trayectoria fiscal, la definición del agregado de gastos, la conveniencia y el diseño de referencias cuantitativas comunes para apoyar el marco reformado, los principios para una ampliación de la senda fiscal, el papel de las recomendaciones específicas por país, la aplicación de los planes nacionales y los incentivos para las reformas y la inversión”.

El liberal alemán es uno de los ministros que se han mostrado más críticos con las orientaciones de política fiscal planteadas por el Ejecutivo comunitario para 2024 en las que descartan abrir este año procedimientos por déficit excesivo por ser un año de transición hacia las nuevas reglas. “Se trata de cuestiones que son tremendamente importantes y sensibles a nivel europeo y nacional. Las conclusiones hablan de que la Comisión mantendrá un dialogo constante con los distintos Estados miembros para abordar las cuestiones sobre las que todavía no hay acuerdo. Es un dialogo que se ha venido manteniendo, que se mantendrá antes y después de la propuesta legislativa”, ha dicho Calviño que ha calificado su diálogo con Lindner de “fluido y constructivo”.

Parámetros consensuados

Los límites del 3% de déficit y del 60% de la deuda seguirán siendo los valores de referencia pero la reforma deberá garantizar que se apliquen de forma “efectiva, eficiente y sostenible”. Los Gobiernos serán los responsables de preparar la senda fiscal de los planes plurianuales que tendrá que ser coherente con “la trayectoria fiscal técnica” de la Comisión, que deberá incluir un análisis de la deuda pública y de los retos económicos. Además, el nuevo marco fiscal deberá permitir “que el proceso democrático de los Estados miembros configure sus políticas económicas” de forma que los planes puedan revisarse, con el ciclo electoral nacional, cuando llegue un nuevo gobiernos siempre que se mantenga “a ambición del ajuste fiscal”. 

Además, el plazo de ajuste presupuestario podría ampliarse si un Estado miembro se compromete a llevar a cabo reformas e inversiones que mejoren las perspectivas de crecimiento o la capacidad de resistencia, refuercen las finanzas públicas y su sostenibilidad a largo plazo, o aborden las prioridades estratégicas de la UE, en materia de transición ecológica y digital o el refuerzo de las capacidades de defensa. Para que la aplicación sea realista, los Veintisiete también están de acuerdo en que en caso de vulneración de las reglas las sanciones económicas sean menores pero el procedimiento de desequilibrio macroeconómico seguirá siendo fundamental para detectar, prevenir y corregir los desequilibrios