La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha cedido y finalmente se reunirá esta tarde a las 17h con la Plataforma de Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera, la organización minoritaria de autónomos y pymes que ha convocado el paro indefinido de los últimos 12 días y que no ha participado en las negociaciones con el Gobierno. Así lo ha anunciado esta mañana en TVE al tiempo que miles de camioneros (4.000 según la Delegación del Gobierno y 10.000 según la Policía) se manifestaban por los alrededores de la sede del Ministerio en Madrid convocados por dicha organización.

Sánchez ha dado así marcha atrás, ya que hace unos días aseguró que no se iba a "sentar con un grupo de radicales que están actuando con violencia”. La ministra, eso sí, ha asegurado que en el encuentro "explicará" a los representantes de la asociación el contenido del acuerdo "histórico" que alcanzó la pasada madrugada con el mayoritario Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) con la esperanza de que lo "sean capaces de valorar". Es decir, que no ha aclarado si en la reunión se reabrirá la negociación y cabe la modificación de dicho pacto. 

Episodios de violencia

La ministra ha defendido que hasta ahora ha negociado con las "personas que los transportistas escogieron para representarlos", en referencia al CNTC. "A partir de ahí siempre dije que era sensible a las reivindicaciones de todos los transportistas", ha afirmado antes de insistir en que los últimos días se han producido "momentos de crispación articulada para generar un ambiente tenso", con "episodios de violencia, de amenazas, de coacción y de insultos".

En la misma línea, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, ha admitido en laSexta que el sector tiene "reivindicaciones absolutamente legítimas", aunque también ha considerado "evidente" que "aquí hay una actuación por parte de Vox", partido al que ha acusado de publicar hoy mismo un 'tuit' para "animar y calentar" este tipo de movilizaciones. "Estamos movilizando un volumen de recursos muy importantes, abordando lo urgente y lo importante del sector. Por tanto, no veo ninguna razón para no poner fin a los paros", ha defendido.

Un pacto de migajas

Durante la manifestación, el presidente de la plataforma, Manuel Hernández, ha advertido de que continuarán con el paro si el Gobierno no acepta sus reivindicaciones. "Sé que hay presiones, pero no nos podemos dejar llevar. Esta batalla no se puede perder. Tenemos que demostrar a nosotros mismos, a nuestras mujeres y nuestros hijos que sabemos luchar por lo nuestro", ha sostenido durante la protesta. Su principal reclamación es que se garantice que las grandes empresas del sector no puedan contratar a los camioneros por un precio que no recoja todos sus costes. 

El líder patronal ha tildado las medidas pactadas por el Gobierno y las asociaciones mayoritarias de "migajas, una simple limosna que no nos soluciona el problema". "Están eludiendo el problema de fondo, no estamos pidiendo subvenciones, sino unos precios garantizados para cubrir nuestros costes de explotación", ha añadido antes de advertir de que la ministra "tiene que convencer a muchos transportistas". También le ha exigido que "pida perdón" por negociar solo con sus "verdugos" y por haber vinculado a los camioneros que han secundado el paro con la ultraderecha y la violencia.

Los manifestantes se han concentrado en los alrededores del Ministerio entre gritos de “cómprate un camión, ministra dimisión” y carteles de “si no nos ves, ministra, vete al oculista” y “el comité nacional no nos representa”, ondeando banderas constitucionales de España y también de casi todas las comunidades autónomas. La mayoría de las pancartas presentaban sus reclamaciones como una lucha sectorial, desvinculada de la política (“No somos ni de izquierdas ni de derechas, somos los de abajo y vamos a por los de arriba”, se leía en una de las más grandes). Sin embargo, también había una pequeña representación de Solidaridad, el sindicato de Vox, así como una par de diputadas de dicho partido.