Ahora que la factura de la luz ha alcanzado para muchas familias niveles desorbitados, la Asociación Madrid Futuro se ha propuesto que esta se reduzca entre un 30% y un 40% en los barrios del sur de Madrid. Y quiere hacerlo mediante la multiplicación del consumo energético sostenible, inundando de placas solares estos distritos.

"Queremos democratizar el acceso a las placas", explica Pablo Vázquez, director de Madrid Futuro, la asociación sin ánimo de lucro y de colaboración público privada que se creó en la primera ola de la pandemia con el objetivo de reimpulsar la ciudad en plena catástrofe sanitaria. La palabra "democratizar" la tiene perfectamente pensada. El norte de Madrid, comenta, se empieza a llenar de paneles solares. Los chalets, dúplex y viviendas de La Moraleja, Aravaca o Pozuelo cada vez se tiñen más del color metalizado de estas planchas energéticas. "En estas zonas ricas a muchas familias la inversión que supone la instalación de estas placas les resulta rentable", apunta Vázquez.

La producción de energía mediante este sistema es más barata, por lo que la factura de la luz se reduce bastante, sin embargo, no todo el mundo puede pagarse los paneles para el consumo individual. "Por eso hemos pensado en cómo podemos trasladar esa misma rentabilidad a los barrios donde las comunidades de propietarios no tienen capacidad financiera para poder realizar el desembolso inicial que supone la instalación de este sistema fotovoltaico".

El proyecto prevé instalar cerca de 100.000 placas solares en los próximos cinco años en barrios como Usera, Villaverde, Carabanchel, Villa de Vallecas o San Blas, pero dependerá del interés que tengan los vecinos

Para conseguirlo han hablado con entidades financieras y empresas energéticas, han conseguido que los socios de la Asociación financien el proyecto con una inversión inicial de diez millones de euros, llevan meses hablando con el Ayuntamiento de Madrid, en concreto, con el área de Urbanismo que dirige Mariano Fuentes, y han diseñado un plan. El objetivo es "promover en zonas no residenciales y populosas la instalación de estos paneles" y para ello las empresas colaboradoras financiarán la inversión inicial y los propietarios pagarán este gasto “como si fuera un leasing”.

Desarrollo del proyecto

El proyecto prevé instalar cerca de 100.000 placas solares en los próximos cinco años en barrios como Usera, Villaverde, Carabanchel, Villa de Vallecas o San Blas, que son los distritos en los que Madrid Futuro ya ha puesto en marcha en su escaso año y medio de vida otros proyectos de carácter social. Con esta cifra, los cálculos de Vázquez indican que cerca de 300.000 familias podrán beneficiarse de una reducción en su factura de la luz, que podría ser de hasta el 40% para cada una de ellas.

Aunque las cifras son ficticias, desde Madrid Futuro ponen el siguiente ejemplo: "Si ahora los vecinos de una comunidad pagan una media de 150 euros por megavatio hora en el mercado mayorista, una vez que tengan instaladas las placas individuales la tarifa podría reducirse a 40 euros. Mediante la fórmula que planteamos, a esos 40 euros tendrán que sumar una cuota similar durante los primeros seis años aproximadamente, para pagar los paneles, pero lo que paguen siempre será muy inferior a esos 150 euros que abonan ahora". El reto en los próximos meses es desplegar una campaña de información para llegar a las comunidades de propietarios de estos barrios y explicarles cuáles son los beneficios medioambientales y económicos que tiene este tipo de energía y cómo puede ayudarles la Asociación.

Por su parte, el Ayuntamiento colaborará con esta entidad mediante la agilización de los permisos y licencias. En septiembre de este año se aprobó en la Junta de Gobierno la Ordenanza de licencias y declaraciones responsables urbanísticas que permitirá, precisamente, simplificar la burocracia para la instalación de estos paneles solares, y la previsión es que pueda estar ya aprobada por el Pleno en el primer trimestre de 2022. Además, acaba de lanzar en el geoportal una aplicación para poder hacer un estudio previo de viabilidad de instalación, analizando las cubiertas y tejados de todo Madrid.

Reto y ahorro de emisiones de Co2

La sostenibilidad es hoy en día uno de los retos de las grandes ciudades y España, teniendo las horas de luz que tiene al año, es solo el cuarto país europeo en producción de energía solar, por detrás de Alemania, Italia y Reino Unido. En Madrid Futuro se han fijado en Berlín para plantear esta proyecto, pues según Vázquez en la ciudad el número de placas solares es tres veces inferior a la que tiene instaladas la capital germana.

Y la diferencia seguirá subiendo si en Madrid no se avanza porque Berlín aprobó el pasado mes de agosto la obligación de que a partir de 2023, bajo amenaza de multa, todos los edificios de nueva construcción y aquellos en los que se hagan reformas importantes cuenten con sistemas fotovoltaicos en el tejado. Según los técnicos de Madrid Futuro que han diseñado este proyecto, la instalación de estas 100.000 placas que tienen previstas podría suponer un ahorro del 4% de las emisiones de CO2.

Origen y evolución de la asociación

Este será uno de los principales proyectos de esta Asociación que preside el alcalde, José Luis Martínez Almeida, y que se creó en julio de 2020 cuando un grupo de empresas decidió ponerse a disposición del Consistorio para ver cómo podían ayudar a los madrileños a salir del desconcierto en el que había quedado sumida la ciudad en los primeros meses de pandemia. “Era la época en la que las calles de Madrid estaban vacías y todo era fantasmal”, recuerda Vázquez.

Hoy la Asociación ha ganado dos años más de vida. Nació con la intención de poner en marcha algunos proyectos que ayudaran a reimpulsar la ciudad pero que debían ser sostenibles por sí mismos. "Lo que la ciudad podía hacer por sí misma no hacía falta tocarlo, en aquel momento entendimos que lo que necesitábamos eran iniciativas transformadoras y nosotros podíamos ayudar en los proyectos sinérgicos o especialmente complejos que pudieran necesitar la colaboración de entidades de diferentes sectores al mismo tiempo", explica Vázquez.

Pero la misión de la Asociación ha ido cambiando según ha evolucionado la situación sanitaria. El principio toda la preocupación estaba focalizada en la pandemia y las emergencias que había provocado; ahora el objetivo es ver dónde están las oportunidades para que Madrid esté a la misma altura que las grandes capitales europeas. De ahí que la fecha prevista para su disolución, julio de 2022, se haya pospuesto. Los socios, que han pasado de 12 a más de 90 en apenas un año largo, han decidido inyectarle gasolina hasta diciembre de 2024.

Proyectos sociales y de transformación digital

La sostenibilidad económica de los proyectos es fundamental para esta entidad, de forma que puedan seguir dando sus frutos en el futuro. Así ha sido con Re-planta, pensado para la recuperación del patrimonio verde de Madrid tras los daños causados por Filomena y cuyos frutos se verán a medio y largo plazo. También el de "barra digital", un proyecto con el que cerca de 500 profesionales voluntarios acompañaron a los propietarios de más de 3.000 comercios o establecimientos de hostelería, muchos de ellos de carácter familiar, a digitalizar sus negocios durante el confinamiento para que pudieran tener sus menús en internet, acceso a plataformas de reparto a domicilio o incluso una presencia hasta entonces inexistente en internet. La necesidad fue decayendo, pero el impacto de la digitalización sigue vivo para estas empresas.

Desde que comenzó la pandemia Madrid Futuro ha ayudado a más de 3.000 comercios y establecimientos hosteleros de Madrid a digitalizar sus negocios para tener presencia online

También el apoyo que recibieron los menores de cerca de mil familias en los barrios del sur de Madrid, que gracias a la donación de ordenadores pudieron seguir online las clases del colegio y así reducir la brecha digital entre barrios. En este proyecto, además, participaron 250 voluntarios que ejercieron de tutores para estos estudiantes que se quedaban desenganchados por la falta de atención presencial.

La internacionalización y atracción de talento también forma parte del plan de esta Asociación. Así surgió la oportunidad de atraer a la empresa tecnológica sueca Klarna a Madrid, que buscaba sede en el sur de Europa para su hub de ingenieros. Esta empresa ofrece la posibilidad de que los consumidores puedan comprar diferentes productos por internet pero no pagarlos hasta que los prueban y deciden quedarse con ellos. Y gracias a la intermediación de Madrid Futuro ya tiene a cerca de 100 ingenieros trabajando en el proyecto y se espera que lleguen a ser hasta 500 en los próximos dos años.

Y para 2022, junto a la irrupción de las placas solares en las comunidades de vecinos de diferentes distritos de Madrid, la Asociación tiene como principal iniciativa el sandbox desarrollo del laboratorio tecnológico que ha puesto en marcha en Villaverde, donde ha convertido parte del barrio en un espacio donde las empresas nacionales e internacionales que han conseguido atraer pueden probar sus proyectos en un entorno real (drones para el reparto de medicamentos y productos varios, coches autónomos, robots de delivery, etc. La previsión de este proyecto es crear más de 3.000 empleos a partir de este mes de enero.