Telefónica firmará este martes una serie de acuerdos laborales pactados en las últimas semanas con los sindicatos CCOO y UGT, entre los que se encuentra su nuevo plan bajas voluntarias al que se podrán adherir un máximo de 2.983 personas con un coste para la empresa de 1.600 millones de euros, aproximadamente.

El plan de salidas se dirige a un total de 4.532 empleados mayores de 54 años de todas las direcciones de la empresa. En el caso de las posiciones de Coordinador, Jefe y Gerente podrán adherirse al plan de suspensión individual el 100% de este colectivo (214 personas), mientras que en las unidades críticas se pueden apuntar como mucho un 38% (483 personas) y en las unidades no críticas un máximo del 75% (2.286).

Entre los beneficios, la empresa abonará un 68% del salario íntegro hasta que cumplan los 65 años a los nacidos en 1.967 y un 65% del salario para los nacidos con anterioridad. Además, cotizará por ellos a la Seguridad Social hasta esa edad y les sufragará el seguro médico. También mantendrán las aportaciones al plan de pensiones, con la obligación de que el trabajador aporte también su parte.

Los sindicatos mayoritarios de la compañía, CCOO y UGT, han aceptado esta última propuesta. "Las condiciones pactadas para el PSI si bien no son exactamente iguales a las anteriores, respetan en esencia los puntos fundamentales de todos los acuerdos: 100% en voluntariedad y una dotación en rentas que permita la estabilidad económica de aquellos compañeros que decidan acogerse", ha defendido UGT.

Los planes de bajas voluntarias son habituales en la 'teleco' para renovar su plantilla. El último se cerró en 2019 con la salida de más de 2.600 trabajadores, la mitad de los cerca de 5.000 que cumplían las condiciones fijadas entonces: tener 53 años o más y llevar más de 15 años en la empresa. Los empleados que decidieron entonces acogerse a ese plan perciben el 68% del salario hasta los 65 años, también mantienen el seguro médico y la empresa abonará el Convenio Especial con la Seguridad Social. El gasto de esta medida se estimó entonces en el entorno de los 1.600 millones de euros, mientras que los ahorros anuales promedio de gastos directos se situaron en alrededor de 220 millones de euros a partir de 2021.