La compañía de baterías inteligentes Ampere Energy ha desarrollado un nuevo modelo de cargador bidireccional de uso doméstico para vehículos eléctricos que optimiza el proceso de carga y gestiona el uso a través de inteligencia artificial. La tecnología bidireccional permite "alimentar" de electricidad la vivienda con la energía almacenada en el vehículo de modo que se pueda hacer frente a cortes de suministro. No es la primera empresa que se anima a usar las baterías de coches eléctricos para suministrar electricidad a la vivienda. Con el Tesla Roadster original era posible retornar la energía a baterías domésticas, si bien esta característica se eliminó después.

La compañía de petróleos de Chile y Repsol invierten en la empresa

La compañía, con sede en la localidad valenciana de Puçol, fue fundada a finales de 2015 por un grupo de empresarios muy vinculados a la transición energética y a las renovables. Entre los cofundadores están Vicente López-Ibor (presidente de la empresa y ex comisionado de la Comisión Nacional de la Energía), Alexandre Díez Baumann (cofundador y director de la firma con sede en Londres Lightsource Renewable Energy), Ander Muelas (impulsor del fabricante de baterías de litio para vehículos eléctricos Endurance Motive) y Carlos López-Ibor (presidente del grupo Wasabi). La firma facturó en 2019 (último año que ha depositado las cuentas) 1.850.055 euros tras aumentar su cifra de negocio un 59,33% y cuenta con 35 trabajadores (la mayoría ingenieros industriales). Repsol (dentro de su apuesta por las renovables) tomó una participación de poco más del 7% de la firma en 2019 y en 2020 entró en el accionariado con un 13,5% la Compañía de Petróleos de Chile (Copec) que se ha volcado en la inversión en fotovoltaicas en Chile y Colombia.

Ignacio Osorio, CEO de la firma, apunta que están centrados en el diseño y desarrollo de soluciones para hacer frente a la transición energética ante la revolución renovable en la que está inmersa Europa. "Nos encontramos en un momento clave de crecimiento de las energías renovables, el aumento del autoconsumo, el despegue del vehículo eléctrico y la digitalización que permite optimar la gestión del consumo. Nos hemos volcado en esos cuatro ejes con una apuesta por la economía circular. Tenemos productos para la vivienda, el coche eléctrico y la industria. Desde el primer momento apostamos por el desarrollo del software y el hardware, algo complicado porque es una producción intensiva en capital".

La firma trabaja en dar una segunda vida a la pila de los vehículos

Con esa estrategia, la compañía desarrolló primero baterías inteligentes que facilitaban el autoconsumo eléctrico con placas fotovoltaicas y en 2020 lanzó el producto E-Loop , que es un cargador del coche eléctrico con capacidad de reconocer la rutina diaria del conductor para adaptar el proceso de carga o descarga (el volcado de la energía de la batería a la vivienda) de forma automática. El sistema informático del cargador permite el ajuste manual de las predicciones, asegurando que el vehículo está completamente cargado cuando se necesita. Osorio incide en que la tecnología del E-Loop es la más disruptiva que hay en España en movilidad eléctrica.

El cargador tiene un coste de 5.000 euros, un precio muy superior a los que comercializan empresas como Iberdrola (que rondan los 800 euros), aunque el directivo de la compañía insiste en que no tiene nada que ver. "La principal ventaja es que es bidireccional y se puede utilizar para cargar el coche o dar luz a la vivienda", subraya. En realidad, los de 800 euros son convertidores de corriente que alimentan un cargador que está dentro del vehículo. "Esto es algo que está cambiando. Los fabricantes de automóviles no quieren tener esos cargadores dentro del coche porque ocupan mucho espacio y la tendencia es eliminarlos", añade.

El 80 % de los vehículos eléctricos puede utilizar el dispositivo diseñado por Ampere Energy. "Tienen que ser coches que admitan la bidireccionalidad. Funciona sin problemas en vehículos de marcas como Nissan, Mitsubishi, Hyundai y Tesla", precisa. El directivo de la compañía asegura que el futuro de la movilidad personal va a estar marcado por los coches eléctricos y este tipo de dispositivos permiten optimizar la carga.

"Al contar con un sistema de gestión inteligente se puede programar el repostaje en función del día de la semana. Por ejemplo, reservar sesenta kilómetros de autonomía para un usuario que utiliza su coche para ir a trabajar de lunes a viernes y dejar el resto para el consumo doméstico, y el fin de semana destinar toda la electricidad al hogar", asegura el CEO de Ampere Energy.

La compañía ha desarrollado un segundo proyecto de electromovilidad que consiste en darle una segunda vida a las baterías que utilizan los coches eléctricos y que duran como máximo diez años. "El aumento del parque de los coches eléctricos va a generar una gran cantidad de baterías que habrá que reciclar. Los fabricantes de coches no ven claro el reciclaje porque es caro y trabajan en darles una segunda vida. Estas baterías usadas ya no sirven para los coches eléctricos porque las condiciones de uso son muy exigentes, pero sí se pueden reutilizar otros diez años como dispositivos para el hogar. En eso estamos ahora", señala Osorio. La firma ha aterrizado en Sudamérica y se ha aliado con la Compañía de Petróleos de Chile (que como otras petroleras está redirigiendo su negocio a las renovables) para crecer en latinoamérica.