El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un techo de gasto para 2021 de 196.097 millones de euros, un máximo histórico tras la incorporación de parte del fondo de recuperación europeo y la transferencia a otras administraciones, basado en una previsión de déficit del 7,7% del PIB en ese año.

La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo que este techo de gasto supera en un 53,7% el límite base de 2020, lo que lo sitúa como un récord, por encima de los 182.439 millones de 2010.

Montero ha insistido en que se trata de un techo de gasto "inédito" por la pandemia y que en términos homogéneos, una vez eliminado este efecto, sería de 136.779 millones de euros.

A esto hay que añadir 27.436 millones de la primera anualidad de los fondos europeos de recuperación -mecanismo de recuperación y resiliencia y React UE-, 18.396 millones de una transferencia extraordinaria a la Seguridad Social y 13.486 millones de una transferencia extraordinaria a las comunidades autónomas, lo que eleva el total a 196.097 millones.

El Consejo de Ministros también ha establecido las referencias de déficit para 2020 -11,3% del PIB, por encima del 10,34 % remitido a Bruselas en abril y del 10,7 % que llegó a alcanzarse en 2012- y 2021 -7,7 % del PIB-, dos ejercicios en los que no hay límites oficiales por la suspensión de las reglas fiscales, también aprobada este martes.

La suspensión de las reglas fiscales se materializará mediante la derogación de los objetivos vigentes y la solicitud al Congreso de los Diputados que declare "que efectivamente nos encontramos ante una pandemia", es decir, que se dan las condiciones previstas en la Constitución para suspender las reglas fiscales, algo que se ha mostrado convencida que la Cámara Baja "va a respaldar".

Ha insistido en que esta suspensión de las reglas fiscales "no significa que este Gobierno renuncie al principio de estabilidad presupuestaria" ni a la "prudencia" para realizar los Presupuestos.

La ministra ha destacado que la referencia de 2021 ya prevé una importante corrección con respecto a 2020, de 3,6 puntos, que no se realizará mediante recortes sino que será "compatible con una política que fortalece el Estado del bienestar".

Así, el reparto inicial del déficit de 2021 será de un 2,4% para la administración central, un 2,2% para las comunidades autónomas, un 3% para la Seguridad Social y un 0,1% para las entidades locales.

Sin embargo, estas referencias se verán alteradas por las dos transferencias extraordinarias que el Estado va a hacer a la Seguridad Social y las comunidades autónomas, de 18.396 y 13.486 millones, respectivamente, para paliar los efectos de la pandemia.

En la práctica, estas transferencias supondrán que la administración central asuma parte del déficit de estos subsectores, de manera que el desfase del Estado alcanzará el 5,2%; el de las comunidades autónomas, el 1,1%; el de la Seguridad Social, el 1,3%, y el de las entidades locales, el 0,1%.