El precio medio de la vivienda nueva en el conjunto de las capitales de provincia de España ha aumentado un 3% durante el último año, hasta alcanzar los 2.472 euros por metro cuadrado construido en junio del 2020, lo que supone un coste de 222.480 euros para una vivienda de tipo medio de 90 metros cuadrados. Sin embargo, el ritmo de crecimiento de semestres anteriores se ha moderado por tercer año consecutivo y, tras el 'shock' pandémico, la variación al alza desde diciembre de 2019 es de apenas un 0,8%.

El informe presentado este martes por Sociedad de Tasación implica que el efecto de la crisis sanitaria sobre el mercado inmobiliario español resulta más moderada de lo que cabía esperar a su inicio. "Es importante que se mantenga la liquidez para las empresas y particulares y el empleo", ha comentado Juan Fernandez Aceytuno, consejero delegado de la tasadora, para quien en la medida en que la liquidez se mantenga la caída de la actividad y los precios serán más moderadas.

El precio medio de la vivienda nueva en el resto de las ciudades estudiadas que no son capitales de provincia se ha situado en 1.674 euros por metro cuadrado. Un importe que representa un aumento del 1,7% con respecto a junio del año pasado.

Ciudades grandes, mayor subida

Si se desglosan los datos por tamaño de población, se observa cómo el precio medio de la vivienda nueva en las ciudades con población superior a 100.000 habitantes que no son capitales de provincia se ha situado en 1.821 euros, con una variación anual del 2,2%; y en las ciudades con población de entre 50.000 y 100.000 habitantes en 1.705 euros (+1,9%). Por su parte, en aquellas que tienen entre 25.000 y 50.000 habitantes ha aumentado un 1,6% hasta llegar a los 1.570 euros. Por último, las ciudades por debajo de los 25.000 habitantes el precio medio es de 1.535 euros (+0,8%).

Por capitales de provincia, tanto Madrid como Barcelona lideran las subidas, aunque con un ritmo mucho más moderado en esta primera mitad del año. La primera experimenta un crecimiento del precio del 4,2% con relación a junio de 2019 (comparativa anual), pero solo el 1% con respecto a diciembre del mismo año (semestral), mientras en el caso de Barcelona, la evolución se sitúa en el 4% y el 1,1%, respectivamente.

En el resto de las capitales se observan incrementos anuales más moderados que en periodos anteriores: Valencia, por ejemplo, crece al 3,7%; Logroño al 3,6% y Tenerife al 3%. Sin embargo, a excepción de Barcelona y Cáceres (1,1%), ninguna de ellas supera el 1% de crecimiento semestral, teniendo en cuenta, eso sí, que ninguna entra en cifras negativas.

Cae la confianza

Con todo, la tasadora detecta una cierta inflexión del ciclo expansivo en el mercado inmobiliario. Destaca, en este sentido, que el Índice de Confianza Inmobiliario de Sociedad de Tasación se sitúa en 43 puntos sobre 100 y mantiene una caída constante desde junio de 2018 (58,5 puntos), que se ha acentuado durante el segundo trimestre del año desde el valor de marzo del 2020 (49,3 puntos), previo a la crisis sanitaria. Es decir, este índice ha caído 6,3 puntos en apenas tres meses.