Rodrigo Utrera es el responsable de renta variable en España y Europa de BBVA Asset Management, y también será el experto encargado de arrojar luz sobre las diferentes oportunidades de inversión en renta variable española y europea, en la jornada que organizan el periódico Mediterráneo y BBVA. El foro económico que reunirá a representantes institucionales y empresariales tendrá lugar el martes, 5 de noviembre, a las 17.30 h, en el Club Diario de Mallorca bajo el título ‘Invertir en renta variable en 2019: ¿Hora de ser valientes o prudentes?’.

¿Cuál es la situación de España en el conjunto de la CEE?

La economía de España tiene fortalezas y debilidades al compararla con países de nuestro entorno. No obstante, en la última década se han corregido numerosos desequilibrios que desembocaron en una crisis aguda en 2008 y los años sucesivos, y ahora estamos en una posición mucho más robusta que entonces para afrontar cualquier adversidad en el entorno macro. En cualquier caso hay que recalcar que las estimaciones de BBVA son de una mera desaceleración y menor tasa de crecimiento, pero a día de hoy no hay ningún indicio de que vaya a producirse una recesión.

A corto y medio plazo, ¿a qué riesgos se enfrenta la economía balear y española en base a las tendencias actuales?

Ahora hablamos del desenlace del Brexit, la guerra comercial y la madurez del ciclo económico. Antes de eso preocupaban las elecciones en las que ganó Trump y el referéndum del Brexit, que nadie esperaba. Estos riesgos se materializaron y el mercado, lejos de bajar, subió. Antes de eso fueron datos económicos negativos en Europa después del pánico que desató la crisis de deuda soberana. Durante la subida de las primas de riesgo y el rescate de Grecia parecía que el mundo se iba a acabar, y antes de eso fueron las dudas sobre la solvencia del sistema financiero mundial, pocos años después de la Guerra de Irak y la irrupción del terrorismo en Occidente. Lo que quiero decir es que por supuesto hay riesgos, pero tenemos que ser conscientes de que siempre los ha habido, y el ser humano suele tener una memoria frágil y pensar que los riesgos del presente siempre son mayores, y tanto el pánico y el sensacionalismo como la complacencia extrema suelen ir acompañados de muy malas decisiones de inversión. El mejor aliado de un inversor a largo plazo siempre es la calma y la objetividad.

¿Cuáles están siendo las consecuencias del panorama actual en el ámbito inversor?

Si uno busca en detalle encontrará empresas de alto componente cíclico que han caído cerca de un 50 por ciento y otras de componente más defensivo que están en máximos históricos. Aunque el efecto neto en los índices aparente cierta estabilidad, creemos que el mercado ya se ha posicionado claramente ante un entorno de menor crecimiento, y eso puede presentar oportunidades excelentes para invertir a largo plazo, aunque siempre manejando con cuidado los riesgos y entendiendo muy bien los negocios que compramos.

¿Cómo afecta todo esto a los inversores? Como dice el título de la conferencia, ¿hemos de ser prudentes o valientes a la hora de invertir?

Para un inversor a largo plazo la renta variable siempre ha sido el activo más rentable y ha batido a la inflación durante más de 100 años, y no creo que con los tipos de interés en mínimos históricos esto sea diferente ahora. Hay que entender, eso sí, que esa rentabilidad mucho mayor va acompañada de mayores volatilidades que el inversor debe tolerar, por eso la renta variable solo es aconsejable para inversores con un plazo a partir de 3-5 años. En plazos mayores la renta variable nunca ha tenido rival. Lo que debe preguntarse un inversor es cuál es su plazo de inversión y actuar en consecuencia. Lo que puede ser altamente recomendable para un inversor puede estar contraindicado para otro con un perfil temporal diferente.

¿Cuáles son los sectores más interesantes para realizar inversiones?

Los sectores defensivos y con correlación negativa a los tipos de interés, como eléctricas, consumo estable o concesionarias, lo han hecho extraordinariamente bien y presentan valoraciones muy elevadas. El posicionamiento del mercado estos últimos meses ha sido extremo, y hay que ser muy cautos. Lo que puede parecer una inversión estable puede ser una malísima inversión si se compra a un precio excesivamente alto. Igualmente, hay que evitar empresas muy baratas y castigadas pero con negocios deteriorados y de poca visibilidad. En entornos como éste es fundamental contar con un equipo de análisis capaz de valorar y entender cada empresa en la cartera y los riesgos y virtudes ocultos que puede presentar una compañía más allá de lo evidente.

Cuáles son los activos con más recorrido para grandes inversores y cuáles para los medianos o pequeños? ¿Qué parte de una inversión debe ir a renta variable?

Creo que con el acceso a fondos de inversión bien gestionados un ahorrador pequeño no tiene por qué tener un menor acceso a las buenas inversiones comparado con un inversor institucional de mayor tamaño.

¿Diversificación o concentración en la cartera de inversiones?

La diversificación en una cartera de renta variable es fundamental para reducir el riesgo y renunciar a ella es un grave error. Sin embargo, una diversificación excesiva acaba siendo contraproducente al tener un menor grado de conocimiento de lo que tenemos en la cartera. En los fondos BBVA Bolsa Europa, Bolsa Euro, Bolsa Tecnología y Comunicaciones, Bolsa y Bolsa Plus construimos carteras con una diversificación óptima que nos permita minimizar los riesgos, pero a su vez sin descuidar un ápice nuestro conocimiento profundo de las ideas en cartera, a las que dedicamos en promedio un mes de estudio por parte de cada uno de nuestros analistas.