La Generalitat de Cataluña ha abierto un expediente informativo a Playmobil por no etiquetar sus cajas de juguetes en catalán. La empresa, con sede en la provincia de Alicante, podría enfrentarse a una sanción de hasta 100.000 euros, considera que la ley catalana de consumo en la que se especifica la pretendida obligatoriedad en el etiquetaje no le afecta.

La apertura del expediente tiene su origen en una denuncia presentada por la Plataforma per la Llengua tanto contra Playmobil, fabricante de los conocidos "cliks", como contra Lego, al considerar que se niegan a cumplir con la ley de consumo.

Según se ha constar en la web de la citada plataforma, la ley 22/2010 del código de consumo de Cataluña obliga, mediante el artículo 128-1, a que que ciertos productos, entre los cuáles están los juguetes, hayan de tener los datos obligatorios del etiquetaje y las instrucciones en catalán.

Sin embargo, añade la plataforma, el jefe de comunicación de Playmobil, Björn Seeger, ha comunicado a la propia entidad que no van a etiquetar en catalán al entender que esta ley no les afecta. Así, hace alusión al Tribunal Constitucional, y señala que "el legislador catalán puede regular que esta documentación sea también en catalán cuando estos productos sean destinados a ser vendidos, exclusivamente, en Cataluña. Pero este no es el caso. Nuestros productos no se comercializarán sólo en Cataluña, sino también en otras comunidades autónomas, por tanto la documentación sólo es obligatoria que sea en castellano".

La plataforma, con todo, rebate estos argumentos, señalando que el Constitucional "ha dicho explícitamente todo lo contrario" en una de sus sentencias. También destaca que en una comunicación reciente, la Agencia Catalana de Consumo expresaba que en el marco de la seguridad jurídica "finalmente se dan las circunstancia adecuadas para aplicar la ley, una vez solucionadas las dudas en virtud de sendas sentencias del TC". Añade, en el mismo sentido, que de acuerdo con la legislación actual, Lego y Playmobil recibirán una sanción de entre 10.001 y 100.000 euros.