El consejo de administración de CaixaBank ha acordado este viernes en sesión extraordinaria trasladar su sede social a Valencia ante la posibilidad de que el Parlament de Cataluña apruebe una declaración unilateral de independencia.

El banco catalán ha adoptado esta medida amparándose en el real decreto ley que ha aprobado el Consejo de MinistrosConsejo de Ministro y por el que se elimina el requisito de someter un traslado de este tipo a la junta de accionistas.

CaixaBank sigue así la estela del Banco Sabadell y de otras empresas catalanas, en su mayoría cotizadas, que en las últimas horas han anunciado que se llevan su domicilio social fuera de Cataluña ante la incertidumbre creada en la comunidad autónoma por el proceso independentista que promueve el Govern.

Aunque desde el jueves se especulaba con la posibilidad de que el traslado del banco fuera a Palma de Mallorca por los vínculos originarios de la entidad con las islas Baleares, finalmente el consejo ha decidido por unanimidad trasladar el domicilio a Valencia, de donde era originario el Banco de Valencia, entidad que CaixaBank adquirió en 2013.

De hecho, la nueva sede social de CaixaBank estará ubicada en la calle Pintor Sorolla, 2-4, de Valencia, antigua sede del Banco de Valencia.

Con esta medida, la entidad que preside Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar persigue "proteger los intereses de los clientes, accionistas y empleados, garantizando la permanencia de la entidad en la zona euro bajo la supervisión del Banco Central Europeo (BCE)" ante una eventual secesión.

"La continuidad en la zona euro garantiza a CaixaBank seguir contando con óptimas condiciones de financiación para, a su vez, mantener el flujo de crédito a familias y empresas en Cataluña y en el resto de España, así como preservar la integridad de los depósitos de sus clientes", destaca la entidad.

El traslado de sede social no implicará ningún cambio en la operativa del grupo, que mantendrá sus servicios centrales en Barcelona, así como su plantilla en toda España.

La Fundación y Criteria, a Palma

Por otra parte, la Fundación Bancaria La Caixa ha acordado este sábado trasladar de Barcelona a Palma de Mallorca la sede social tanto de este organismo como de CriteriaCaixa, la sociedad de la que es accionista único y que gestiona el patrimonio de la entidad, "mientras se mantenga la actual situación en Cataluña".

En un comunicado, la Fundación que preside Isidre Fainé ha informado de que el nuevo domicilio social de estas dos entidades estará situado en la Plaça Weyler, 3, de Palma, con el fin de preservar sus intereses empresariales y sociales, así como su operativa normal.

Esta decisión, asegura la Fundación La Caixa, "tiene un carácter temporal" y no implica el traslado de personas ni de centros o servicios corporativos, que seguirán operando como hasta ahora con normalidad.

La Fundación Bancaria La Caixa gestiona de forma directa la Obra Social, que se financia con los dividendos obtenidos de CriteriaCaixa, y cuenta este año con un presupuesto de 510 millones de euros, principalmente para actividades sociales, educativas, culturales, de investigación y emprendimiento.

CriteriaCaixa, por su parte, es la sociedad 'holding' de inversiones no cotizada que gestiona el patrimonio de la Fundación Bancaria y cuenta con una cartera compuesta por participaciones accionariales en sectores estratégicos tales como el bancario, energético, las infraestructuras, los servicios y el negocio inmobiliario.

Casi 16 millones de clientes

CaixaBank es el banco líder en Cataluña y uno de los más importantes de España, con una red de más de 5.400 oficinas, 9.400 cajeros, 15,8 millones de clientes y más de 37.000 empleados en el mercado ibérico.

La entidad, participada por la Fundación Bancaria La Caixa a través de CriteriaCaixa, que controla un 40 % del accionariado, gestiona unos recursos de clientes cercanos a los 350.000 millones de euros y en el primer semestre de este año ha alcanzado un beneficio de 839 millones de euros.

CaixaBank, una de las principales compañías del IBEX 35, el principal índice selectivo de la Bolsa española, ha caído este viernes un 3,73 % después de que el jueves encabezara las subidas, con un avance del 4,93 %.

La inestabilidad política creada por el proceso independentista ha llevado a numerosas empresas catalanas a trasladar su sede fuera de Cataluña o a plantearse esta opción en caso de que el Parlament haga una declaración de independencia de forma unilateral.

Así lo han hecho el Sabadell, Banco Mediolanum, Arquia Banca, Oryzon, Dogi, Naturhouse o Derby Hotels, mientras que otras compañías como Freixenet, Catalana Occidente o Renta Corporación abren la puerta a adoptar una decisión similar en función de los acontecimientos políticos.