El consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) discute sobre el futuro del billete de 500 euros, que es usado con frecuencia para blanquear dinero de actividades criminales.

El BCE comunicará al final de la tarde las decisiones del consejo de gobierno.

Actualmente hay en circulación casi 600 millones de billetes de 500 euros, que deberán ser sustituidos cuando se retire de la circulación y deje ser un medio de pago legal.

El billete de 500 euros se vincula con el blanqueo de dinero, las actividades ilícitas y la economía sumergida por ello quien está a favor de su desaparición espera que de este modo se reduzcan todas esas actividades y la financiación del terrorismo, por ejemplo.

El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo en una ocasión que "el billete de 500 euros es un instrumento para actividades ilegales".

Pero el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, ha cuestionado que la desaparición del billete de 500 euros vaya a reducir las actividades criminales.

El consejo de gobierno necesita una mayoría simple para aprobar la desaparición del billete lila con motivos arquitectónicos del siglo XX.

Los billetes de 500 euros son sólo el 3,2 % de los 18.600 millones de billetes de euro en circulación pero tienen el 27,8 %, unos 297.000 millones de euros, del valor total de todos los billetes.

El presidente del Instituto de Investigación Económica alemán (Ifo), Clemens Fuest, se opone a su desaparición porque considera que "reducirá la confianza en el BCE y creará la impresión de que la principal razón para su retirada es bajar más los tipos de interés".

Los tipos de interés negativos no tienen impacto en el efectivo pero sí en las cuantas bancarias electrónicas, añadió Fuest.

La desaparición del billete de 500 euros incrementará el coste de almacenamiento de billetes de denominaciones más pequeñas para las cajas de ahorro y los bancos, considera el presidente del Ifo.

En Alemania existe una gran preferencia por el efectivo entre la población, que guarda cantidades de dinero importantes en casa.