El Banco Central Europeo (BCE) bajará este jueves, previsiblemente, los tipos de interés en la zona del euro y aprobará medidas para impulsar el crédito a las empresas y las familias y la inflación.

El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo a comienzos de mayo que el consejo de gobierno se sentiría cómodo actuando en junio contra la baja inflación y en la misma línea se han manifestado posteriormente otros miembros del comité ejecutivo y también del consejo de gobierno, incluido el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann.

La mayor parte de los analistas prevé que el BCE recortará el precio del dinero, actualmente en el mínimo histórico del 0,25 %, en 10 ó 15 puntos básicos.

Este recorte también se aplicará a los depósitos bancarios en el BCE, que se situarán en terreno negativo, pronostican los expertos de UniCredit.

De este modo el BCE penalizará a los bancos que quieran depositar dinero en su ventanilla con el fin de impulsar el crédito.

Asimismo el BCE prolongará hasta mediados de 2016 el procedimiento de adjudicación plena para las subastas semanales, que permite a los bancos obtener toda la liquidez que solicitan semanalmente.

El BCE irá más lejos y podría aprobar una nueva inyección de liquidez a largo plazo condicionada a que los bancos presten a las empresas y los hogares con el fin de impulsar el crecimiento económico en la zona del euro.

Compra de bonos

La entidad monetaria también podría aprobar un programa de compra de bonos de titulización de activos El BCE y el Banco de Inglaterra (BoE) dijeron recientemente que la titulización puede ayudar a los bancos a prestar sin comprometer demasiado capital u otras fuentes de financiación y así proporcionar al mercado indirecto acceso a grupos de prestatarios que no pueden llagar al mercado directamente, como las pymes.

No hay consenso en los mercados y entre los analistas sobre la cantidad de activos que el BCE podría comprar, ni sobre durante cuánto tiempo.

El BCE también publicará sus nuevas proyecciones macroeconómicas de inflación y crecimiento en las que previsiblemente se producirá una revisión a la baja de los pronósticos sobre el incremento de los precios.

La inflación interanual en la zona del euro bajó en mayo dos puntos porcentuales hasta el 0,5 %, frente al mes anterior, porcentaje que se aleja mucho del objetivo del BCE, que es una tasa en niveles inferiores, aunque próximos, al 2 %.

La economía de la zona del euro creció el 0,2 % en el primer trimestre del año en comparación con el trimestre anterior.

El BCE pronosticó en marzo una inflación del 1 % para 2014, del 1,3 % para 2015 y del 1,5 % en 2016.

Asimismo el BCE prevé un crecimiento del 1,2 % para el 2014, de un 1,5 % en 2015 y un 1,8 % en 2016.