El ministro español de Economía, Luis de Guindos, defendió hoy en Bruselas el compromiso y los objetivos de reducción del déficit del Gobierno y subrayó que ese recorte debe seguir una senda "razonable".

Según De Guindos, hay una "reducción del déficit público que se tiene que producir, que es inevitable, pero que también tiene que hacerse en una senda que es razonable. Y creemos que la actual senda lo es".

El ministro se pronunció así a su llegada a la reunión que los ministros de Finanzas de la UE (Ecofin) celebran hoy en Bruselas y después de que ayer el Eurogrupo instase a España a continuar aplicando "con resolución" las medidas acordadas para reducir el desequilibrio en las cuentas públicas.

Las previsiones macroeconómicas hasta 2014 que la Comisión Europea publicó la semana pasada prevén que el déficit público español alcanzará este año el 8 % del PIB, tras lo que se reduciría en 2013 hasta el 6 %, para volver a repuntar en 2014 hasta el 6,4 %.

De cumplirse esos pronósticos, España no alcanzaría los objetivos de reducción de déficit fijados por Bruselas.

Sin embargo, De Guindos ya aseguró ayer que el Gobierno mantiene sus previsiones de déficit, del 6,5 % en 2012 y del 4,5 % el año que viene.

"El Gobierno español tiene un compromiso desde el punto de vista de lo que son sus objetivos fiscales y ahí es lógicamente donde se han producido todas las decisiones que ha tomado el Gobierno en los últimos meses, en las últimas semanas incluso", recordó hoy a su llegada al Ecofin.

De Guindos insistió en que el Ejecutivo considera importante el recorte del déficit, tanto por sí mismo como por la necesidad "de eliminar dudas sobre la financiación de España".

"No hay ningún tipo de modificación de la estrategia de España", subrayó.

Preguntado por las discusiones mantenidas anoche en el Eurogrupo, De Guindos aseguró que en el caso de España el debate se limitó al programa de recapitalización de la banca.

Éste, explicó, "va produciéndose según los tiempos establecidos y acordados" y los ministros de Finanzas de la zona euro trataron principalmente los próximos pasos, como son la puesta en marcha el 1 de diciembre del llamado "banco malo", los planes de reestructuración de las entidades que Bruselas debe aprobar este mes y las inyecciones de capital a los bancos nacionalizados, que llegarán "a principios de diciembre".

De Guindos aseguró además que en ningún momento se puso sobre la mesa la posibilidad de que España solicite ayuda a sus socios para activar el programa de compra de deuda del Banco Central Europeo (BCE).

"En absoluto", respondió preguntado por los periodistas.

El ministro español explicó que Grecia ocupó anoche el grueso de las conversaciones del Eurogrupo y confió en que el próximo día 20 los socios de la moneda única logren una "solución" para Atenas.

Según De Guindos, ayer se "reconoció el esfuerzo que ha hecho el nuevo Gobierno griego en los últimos dos meses" y ahora es necesario lograr un acuerdo sobre la "sostenibilidad" de la deuda helena.

"En esa discusión es en la que tenemos que encontrar soluciones en los próximos días para que, efectivamente, se produzca una solución que se considere y que se perciba como definitiva para Grecia. Eso va a ser fundamental para todos", indicó.