El Ibex 35 se ha dado la vuelta en el tramo final de la sesión y ha cerrado casi en plano (-0,19%), con lo que no ha logrado reconquistar los 8.800 puntos, al contagiarse de las dudas en torno a las cifras de déficit público de 2011 y diluir así la subasta exitosa del Tesoro público.

Entre los pesos pesados del selectivo, Santander (-0,9%), Repsol YPF (-0,33%) y BBVA (-0,22%) cerraron en rojo. Telefónica e Iberdrola salvaron las pérdidas, con leves avances del 0,19% y del 0,8%, respectivamente.

Los títulos de Mediaset (-3,50%) se anotaron la mayor caída de la sesión, seguidos por los de Caixabank (-2,32%) y Sacyr (-2,03%). Sabadell perdió un 1,66% y Popular, un 1,43%, tras la rebaja de Fitch sobre las notas de los grandes de la banca.

En negativo, Red Eléctrica se erigió como el valor del Ibex que más se revalorizó, con un repunte de su cotización del 3,77%. Le siguió BME, que subió un 2,33% ante la posibilidad de que España siga la estela de Francia y Bélgica y levante el veto sobre posiciones cortas.

En el resto de plazas del Viejo Continente, sólo Milán esquivó las pérdidas, con una leve ganancia del 0,5%. Ahora bien, todas las Bolsas europeas cerraron casi en tablas. París se dejó un 0,3%, Lisboa, un 0,2%, mientras que Francfort y Londres perdieron un 0,1%.

La rebaja del 'rating' de España en dos escalones aplicado por Moody's se dejó sentir en el mercado de deuda pública, pues la prima de riesgo española se mantenía en el entorno de los 340 puntos básicos.

Por su parte, el euro ganaba posiciones respecto al dólar y cerraba la sesión en 1,3137 'billetes verdes'.