Antonio Manuel Pérez Álvarez (Vigo, 1945), presidente consejero delegado de Eastman Kodak desde 2005, ha sido nombrado por el presidente de EE UU, Barack Obama, miembro del Consejo sobre Empleo y Competitividad, cuya misión es estimular el mercado laboral, informó la Casa Blanca. El consejo, al que se han incorporado otros 21 miembros, todos representantes de las empresas más importantes del país, tiene la tarea de fomentar la creación de empleos en EE UU y el fortalecimiento de la economía.

Pérez viaja de forma habitual desde Nueva York, donde está la sede de la empresa de fotografía, a la que se sumó en 2003, para pasar temporadas en Vigo, donde vive parte de su familia. Es habitual ver en las pistas de la localidad su avión privado, un Bombardier BD-700 estacionado frente a las naves de handling del aeropuerto.

El único español que dirige una gran firma norteamericana, tiene contrato en vigor hasta finales de 2013, acude a su habitual cita con España, no solo en la temporada de verano, acompañado por su esposa e hijos —tiene tres de dos matrimonios—, sino que en invierno, cuando debe desplazarse a Europa o Asia por motivos de trabajo, aprovecha la ida o la vuelta de su viaje para hacer una parada en Vigo. Dicen en el aeropuerto que sus llegadas son discretas, solo se sabe que está en la ciudad al ver aparcado su jet en las pistas.

Antonio Pérez Álvarez es un hombre discreto, según quienes le conocen bien. Trabajador y constante, una de las cualidades que heredó de su padre, Antonio Pérez Vázquez, exportador de pescado, hijo a su vez de exportador, una tradición que Antonio Pérez rompió no sin antes comprobar personalmente cómo era el trabajo de esos hombres que levantaron uno de los mayores emporios pesqueros de Europa.

Aprendió temprano que el trabajo es esfuerzo, no en vano su padre le obligaba a acudir a las cinco de la mañana, mientras cursaba Bachillerato, a las subastas. Allí se dio cuenta de que aquel trabajo no estaba hecho para él y optó por crear su propio camino.