CCOO y UGT aseguraron hoy que el conflicto social que llevó a la huelga general "sigue abierto" y que no se reanudará el diálogo social en tanto el Gobierno no modifique su política económica y la patronal deje de "obstaculizar" la negociación colectiva.

En una rueda de prensa posterior a una reunión con la secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, el secretario de Acción Sindical de CCOO, Ramón Górriz, dijo que han emplazado al Ejecutivo a que retire los aspectos más lesivos de la reforma laboral, descongele las pensiones y abandone la pretensión de alargar la vida laboral.

Górriz quiso dejar claro que la reunión de hoy no supone la reanudación del diálogo social, ya que encima de la mesa no están las reivindicaciones que llevaron a los sindicatos a convocar la huelga general del 29 de septiembre.

El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, señaló que los sindicatos atenderán todas las llamadas "a negociar y dialogar", si bien recalcó que el diálogo social va más allá de "hacer reuniones".

A su juicio, el diálogo social requiere compartir un diagnóstico de la situación y contar con objetivos compartidos, algo que "no existe hoy".

Insistió en que fue el Gobierno quien vulneró el dialogo social y dijo que éste "no puede ser el instrumento para legitimar políticas antisociales".