La comisión de Asuntos Económicos de la Eurocámara ha pedido hoy -por 32 votos a favor, 8 en contra y 4 abstenciones- prolongar las ayudas estatales a las minas de carbón no competitivas hasta el 31 de diciembre de 2018. El vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, ha propuesto continuar con estas subvenciones, que expiraban a finales de año, hasta el 1 de octubre de 2014.

La solicitud, que no tiene carácter vinculante porque la decisión final corresponde a los ministros de Industria de la UE, todavía tiene que ser ratificada por el pleno del Parlamento Europeo el 23 de noviembre. Los eurodiputados quieren también que las minas sujetas a cierre puedan seguir funcionando después de 2018 sin devolver las ayudas si consiguen volver a ser competitivas.

La Eurocámara reclama que el ritmo de reducción de las subvenciones no sea tan radical como había propuesto el Ejecutivo comunitario. La propuesta de Bruselas planteaba reducir las ayudas públicas al cierre en un 33 por ciento cada quince meses, mientras que la comisión Económica plantea que esa reducción se limite a un 10 por ciento al año.

En el informe, de carácter consultivo, la comisión parlamentaria subraya que el cierre de las minas deficitarias obligaría a corto plazo a algunos Estados miembros "a hacer frente a graves consecuencias sociales y regionales".

Además, los diputados consideran que la fecha de 2014 para el plan de cierre de las minas es arbitraria y no está justificada por la evaluación de impacto realizada por el propio ejecutivo de la UE. Por ello, la fecha de 2018 garantiza una solución aceptable, teniendo en cuenta dicha evaluación de impacto.

"No es todo lo que nos gustaría haber logrado, pero es un compromiso mucho más aceptable que el que propone el comisario", ha dicho el eurodiputado del PP, Salvador Garriga, en un comunicado, en el que ha anunciado además que durante la votación en pleno no descarta aún elevar la fecha hasta 2020.