El deterioro económico y el alza del paro provocaron que 1.558 empresas y personas se declararan en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) en el primer trimestre, una cifra récord que supone multiplicar casi por cuatro la del mismo período de 2008 y un aumento del 44% respecto al trimestre anterior. Según la Estadística del Procedimiento Concursal publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de particulares insolventes se triplicó en variación interanual (creció un 203%), hasta llegar a los 200, en tanto que las empresas y autónomos en concurso de acreedores casi se cuadruplicaron (aumentaron un 278,3%), hasta 1.358.

En el Registro de Economistas Forenses (REFor) esperan que el alza de las suspensiones de pagos se mantenga en 2009 y que se superen así las 6.000 insolvencias.