La pérdida de posición se produjo ayer, cuando Air China cayó un 4,59 por ciento en la bolsa de Shanghai (que cerró un 3,09 por ciento a la baja), con lo que su valor de mercado se redujo hasta los 11.500 millones de dólares (7.280 millones de euros), por debajo de los 12.800 millones de dólares de SIA (8.100 millones de euros).

El índice general de Shanghai, el principal indicador nacional, ha caído más de un 50 por ciento en lo que va de año y las aerolíneas chinas están siguiendo el mismo camino, mientras los precios de los combustibles de aviación aumentan y, ante la inflación, los viajeros nacionales vuelan menos que otros años.

El pasado 20 de junio China elevó los precios de los combustibles de aviación para sus rutas internas un 25 por ciento, con lo que añadió 15.000 millones de yuanes a los costes de operación anuales de las aerolíneas del país (1.386 millones de euros, 2.185 millones de dólares).

"Air China está cayendo de regreso hacia un valor y una posición justas", dijo el analista Li Lei, de China Securities, dando a entender que sus acciones estaban sobrevaloradas hasta hace poco.

"Las aerolíneas, que son más volátiles cuando suben los precios de los inversores, no tienen el favor de los inversores".

De hecho, el fenómeno de la sobrevaloración que se está corrigiendo se puede aplicar a prácticamente todo el mercado de valores, según el analista Chen Li, de la corredora shanghainesa Shenyin & Wanguo.

"Sólo ahora las acciones están siendo valoradas de manera justa", afirmó Chen, que aseguró que la bolsa de Shanghai recuperará la fiabilidad y el atractivo cuando su índice general caiga otro 5 por ciento y esté entre los 2.500 y los 2.600 puntos.

Por su parte, las acciones de SIA apenas cambiaron su valor ayer en Singapur, aunque cayeron un 15 por ciento en lo que va de año.