Incivismo

Emaya encarga la limpieza de grafitis en edificios protegidos a empresas privadas

Justifica que no tiene recursos técnicos para abordar estos trabajos y sólo eliminará pintadas de inmuebles públicos y de particulares

«No es una externalización, es un apoyo», subraya el regidor Llorenç Bauzá

Las pintadas del edificio del Pont des Tren serán eliminadas en breve.

Las pintadas del edificio del Pont des Tren serán eliminadas en breve. / Arca

Jaume Bauzà

Jaume Bauzà

Emaya subcontrata desde el pasado mes de septiembre a empresas privadas la eliminación de pintadas vandálicas en edificios protegidos o catalogados, muchos de ellos en el centro histórico de Palma. La empresa pública argumenta que, aunque dispone de los recursos humanos para afrontar esta tarea, le faltan los recursos técnicos para trabajar con seguridad en este tipo de fachadas.

«Hay que dejar claro que no es una externalización, es un complemento al trabajo que sigue realizando Emaya. Continuamos eliminando pintadas vandálicas en edificios públicos y de titularidad privada, pero estas empresas nos ayudan con los inmuebles protegidos. Para limpiar determinadas superficies necesitamos apoyo externo», explicó ayer el presidente de Emaya y regidor de Medio Ambiente y Espacios Naturales, Llorenç Bauzá.

Esta experiencia empezó en septiembre, cuando la empresa Refoart se hizo cargo de la eliminación de pintadas en la estación del tren de Sóller de Palma. «Vamos a ir por fases. Esta primera durará hasta diciembre y la próxima actuación será en el Pont des Tren. También se hará cargo una empresa especializada y se ejecutará en breve, solo estamos pendientes de un trámite con el Consell», indicó Bauzá.

Emaya no dispone de la técnica para erradicar grafitis de fachadas protegidas, sobre las que hasta ahora actuaba de manera superficial. Sin embargo, la proliferación de pintadas en el centro histórico han aconsejado al Consistorio a recurrir a este sistema. «La propia empresa se encarga de tramitar los permisos de retirada, y trabaja con la Comisión del Centro Histórico o con el Consell para abordar los detalles técnicos», manifestó el presidente de Emaya.

De este modo, sostuvo Bauzá, «se agiliza la eliminación de pintadas vandálicas y se disponen de más recursos para trabajar en fachadas de edificios públicos y de particulares».

Dos euros en edificios privados

En este sentido, el presidente de Emaya recordó que la empresa pública tiene un servicio de limpieza de pintadas en edificios privados a un precio simbólico de dos euros el metro cuadrado en caso de ser la primera solicitud.

Los interesados pueden solicitar esta prestación a través de la web de Emaya, donde se incluye toda la información y un formulario para detallar las características del inmueble y de los grafitis que hay que eliminar. Del mismo modo, hay que adjuntar la documentación requerida y fotografías de las pintadas.

A continuación Emaya envía al particular un presupuesto. Una vez abonado, se genera la orden de trabajo y en un plazo máximo de quince días se materializa el servicio. En todo caso, quedan excluidas del servicio barreras metálicas.

Entre enero y septiembre Emaya limpió en torno a 3.500 pintadas vandálicas, lo que significa una media de 380 intervenciones al mes.

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