Lágrimas y abrazos en el palco de Nadal en su despedida de Madrid

La mujer, la hermana y la madre del tenista viven emocionadas el homenaje al tenista en su adiós a la Caja Mágica

Palma

La emoción se desbordó en la Caja Mágica este martes por la noche con la derrota de Rafa Nadal y su despedida de Madrid, torneo Masters 1.000 al que el tenista mallorquín ha acudido a disputar siempre que ha estado apto para jugar y que ha ganado en cinco ocasiones.

Fue una depedida emotiva para el público, para Nadal y para los miembros de su familia. Su mujer, Mery Perelló, su hermana Maribel y su madre, Ana María Parera, vivieron de forma especial el momento, no pudiendo contener las lágrimas en una ceremonia en la que el tenista de Manacor rompió el hielo con una broma sobre su retirada tras recibir un recuerdo de manos de su amigo Feliciano López, director del torneo: «Era una broma, el año que viene vuelvo».

Tras oír corear su nombre, Rafa Nadal se dirigió al público para agradecer su apoyo estos años, aunque fue interrumpido en varias ocasiones. Por aplausos y gritos coreando su nombre. «Para mí, ha sido un regalo el que me habéis hecho en estos 21 años, quizás más importante que algún Grand Slam. Las emociones de jugar en esta pista, con el público español, esto algo que se quedará para siempre», aseguró el manacorí.

Mucha emoción en su palco

Antes, en su palco de la Caja Mágica la familia del mallorquín habían seguido con mucha atención el partido. Maribel Nadal y Mery Perelló sufrían cada punto perdido, confiando en que Nadal pudiera hacerse con la victoria. Ana María Parera, sentada junto a Maribel, le consolaba mientras la hermana del tenista se secaba las lágrimas. Al terminar el encuentro se abrazó a Mery Perelló, quien también se mostró emocionada ante el momento de la despedida.

Un sentimiento que se desbordó con el homenaje a Nadal, conocedores del histórico momento al que se estaba asistiendo en una pista en la que ya habían llorado en años anteriores. Aunque entonces eran lágrimas de alegría por el triunfo. Este martes fueron lágrimas por la despedida de uno de los torneos en los que el jugador de Manacor era más querido.

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