Selección española

Scariolo y la obra maestra del Eurobasket

España conquistó el título europeo dinamitando todos los pronósticos con un grupo en plena renovación bajo la magia de la pizarra del técnico italiano

Sergio Scariolo posa con el trofeo del Eurobasket y destaca sus cuatro títulos con la mano.

Sergio Scariolo posa con el trofeo del Eurobasket y destaca sus cuatro títulos con la mano. / Reuters

Luis Mendiola

Es imposible encontrar un ejemplo más ilustrativo del impacto de un entrenador en un equipo que el de Sergio Scariolo en el pasado Eurobasket. La selección española no aparecía, ni de lejos, entre los candidatos al título. Se presentó en el campeonato con un bloque huérfano de estrellas, con siete debutantes en la competición internacional y salió de la final de Berlín como tetracampeona europea, con el elogio unánime por su indiscutible victoria frente a Francia y la confirmación del talento y la magia que emana de la pizarra del técnico italiano.

"Scariolo es capaz de sentirse muy cercano a los jugadores y a la vez que los jugadores sepan que él es el jefe del equipo. Y creo que eso tan sencillo de explicar, tan difícil de aplicar, es la clave de su éxito como seleccionador y de la selección española", admite el presidente de la federación, Jorge Garbajosa.

No existe un seleccionador en la historia del deporte en España que resista la comparación con Scariolo (Brescia, 1961). Desde que aterrizó en el cargo en 2009, como relevo de Aíto, solución de urgencia que se buscó tras la etapa de Pepu Hernández para afrontar los Juegos de Pekín, el técnico italiano ha ido construyendo una carrera sobresaliente y un palmarés deslumbrante. La victoria en el Eurobasket de 2022, dinamitando todos los pronósticos, es su obra maestra, y lo sitúa en los altares de la afición.

“Esa victoria está entre las grandes sorpresas del deporte reciente y está entre las tops de las que hemos conseguido. No es fácil que un equipo entre como octavo favorito en los ránkings y acabe ganando”, valoraba Scariolo en una conversación con El Periódico, del grupo Prensa Ibérica.

Gesta inesperada

Con el triunfo frente a una Francia orgullosa de sus siete estrellas NBA y claramente favorita, Scariolo sumó su quinta medalla en un Eurobasket (tetracampeón continental en 2009, 2011, 2015 y 2022; bronce en 2017), y superó a leyendas como Dusan Ivkovic y Aleksander Nikolic, que ganaron cuatro metales con la antigua Yugoslavia (solo el legendario Alexander Gomelski y sus 10 medallas con la URSS están por delante). Ese palmarés continental, unido al título de campeón del mundo de China en 2019, la plata olímpica de Londres y el bronce en los Juegos de Río, convierten a Scariolo en una referencia indiscutible de los banquillos a nivel mundial.

La retirada de los hermanos Gasol, las lesiones de jugadores claves como Ricky Rubio, Llull, Claver, Abrines, Abalde y la renuncia de Mirotic, dejó al veterano Rudy Fernández como único guardián de las esencias de la Generación de Oro, con el apoyo de los hermanos Willy y Juancho Hernángómez y pintó un panorama poco halagüeño para el grupo, inmerso además en la polémica de la nacionalización del base estadounidense Lorenzo Brown.

Pero el deporte se abre de vez en cuando a gestas inesperadas. Todos los favoritos fueron quedándose en el camino: la Lituania de Sabonis, la Eslovenia de Doncic, la Serbia de Jokic, la Grecia de Antetokounmpo, mientras España crecía en confianza y fuerza en el torneo bajo la dirección de Scariolo hasta firmar el partido perfecto frente a Francia en la final y alzar el título de campeona de Europa, una conquista que quedará para la memoria colectiva.

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