España solo necesitaba un punto para confirmar su pase a las semifinales de la Billie Jean King Cup pero se despidió eliminada con un contundente 3-0 ante Gran Bretaña y sin conseguir un set. Un fiasco inesperado y doloroso con das derrotas de Nuria Párrizas ante ni Heather Watson (6-0, 6-2), Paula Badosa ante Harriet Dart (6-3, 6-4) y Aliona Bolsova y Rebeka Masarova el último punto del doble ante Alicie Barnett y Olivia Nichols por 7-5 y 6-2. Gran Bretaña se ganó el derecho de pasar a las semifinales por primera vez desde 1981 y sin su número 1, Emma Raducanu, campeona del Abierto de Estados Unidos en 2021, lesionada.

Lo que parecía iba a ser una jornada plácida para el equipo español para acceder a las semifinales ante Australia se convirtió en una agonía y drama final sin fin por las oportunidades que se iban escapando a medida que se perdían los partidos.

Párrizas tuvo en su mano la posibilidad de certificar la victoria española pero se le escapó en poco más de una hora. Watson (115 mundial) la sorprendió con una contundente victoria y cediendo solo dos juegos. Nada que ver con la batalla que el día anterior la tenista granadina (72 mundial) había mantenido con la kazaja Yulia Putintseva para dar el primer punto a España.

Watson, de 30 años, que llegó a estar la 39 mundial y cuenta en su palmarés con cuatro títulos (Acapulco 2020 y 2016), Monterrey (2015) y Osaka (2012), pero que no había jugado la anterior eliminatoria ante Kazajistán, entró en la pista sin nada que perder, para mostrar un tenis potente y agresivo y para para ganar el partido con 20 golpes ganadores y 10 errores no forzados por solo 5 ganadores y 20 no forzados de Párrizas.

Badosa, desconocida

Tampoco pudo conseguir ese punto definitivo Badosa. La tenista catalana, que había dado el día anterior los dos puntos a España con su victoria ante Elena Rybakina y en el doble junto a Aliona Bolsova, no era la misma sobre la pista. Entró seria y presionada por la necesidad de su victoria ante Harriet Dart (98 mundial) que, como Watson ante Párrizas, tampoco tenía nada que perder.

Desde el primer 'break' (1-0), Dart impuso el ritmo y tomó el mando del partido ante una Badosa desconocida. La tenista británica se mostró sólida en el fondo, segura con su saque y efectiva con sus golpes planos. Así mantuvo la ventaja inicial hasta apuntarse el primer set ante la alegría de los miles de aficionados británicos sorprendidos por la reacción de su equipo.

Badosa se desesperaba hacia su banquillo. "No puedo, no puedo", le decía a su entrenador Jorge García que, como Anabel Medina, trataban de animarla. La diferencia de ránking con Dart no se notaba. La catalana salvó un 'break point' en el segundo juego para evitar el 0-2 para la británica y dispuso de dos oportunidades de romper el servicio de su rival en el tercer juego y el quinto. Pero Dart se agarró con su saque y también con los errores de Badosa (acabó con 29 el partido), los tres últimos para ceder su saque por última vez y el partido en 1 hora y 33 minutos.