Inglaterra no falló en la segunda oportunidad que le brindó Wembley. Venció 2-1 a Alemania para llevarse la primera Eurocopa del país, firmando un nuevo récord de asistencia de 87.192 espectadores, superando los 79.115 del Santiago Bernabéu en 1964.

El ruido de un escenario tan emblemático reprimió a las futbolistas de ambos países en el primer tiempo, que no lograron plasmar el fútbol que les había traído a la final. El planteamiento de ambas técnicas para el primer tiempo estaba diseñado con demasiada cautela. Wiegman y Voss-Tecklenburg, conociendo el potencial de sus rivales, se preocuparon más de frenar el centro del campo que de crear su propio juego, lo que dio pie a un primer tiempo con un ritmo más pausado que en el resto de partidos, en el que ninguna estaba dispuesta a arriesgar demasiado y que el precio a pagar fuese demasiado alto.

En los primeros minutos sí se observó a una Inglaterra con más decisión ante una Alemania apagada tras la lesión de Popp, su estrella, en el calentamiento. Ellen White y Beth Mead lo intentaron al principio del partido. Pero la primera oportunidad clara de Däbritz, que frenó Bronze, hizo que las anfitrionas dieran un paso hacia atrás y que las de Voss-Tecklenburg recuperaran la confianza perdida. A mediados del primer tiempo, Hegering tuvo la oportunidad más clara del equipo. Un remate entre cinco jugadoras del equipo que generó mucha polémica por una posible mano de Inglaterra. Para ellas, sin embargo, la oportunidad más clara no llegó hasta casi al descanso. Tras un pase de Mead, un disparo demasiado forzado de White que salió arriba.

Alemania salió dispuesta a levantar su noveno título en el segundo tiempoLo intentaron Magull y Schuller en los primeros minutos. Pero Inglaterra, sin hacer demasiado ruido, se adelantó. Una asistencia de Walsh a Ella Toone desde casi el área contraria que definió la del United con una vaselina que hizo vibrar a los 87.000 aficionados de Wembley. Pero el gol de Inglaterra no hizo dar un paso atrás a Alemania. Más bien todo lo contrario. Pudo marcar Magull con un disparo que golpeó en el larguero, remató Schuller pero acabó parando Earps. Pero el empate no tardaría en llegar. Magull había avisado en varias ocasiones. Y casi en un calco del tanto de Inglaterra, Wasmuth asistió a la delantera del Bayern, que definió a la perfección para igualar a las inglesas y forzar la prórroga.

Wembley apretó. E Inglaterra no decepcionó. Tras un remate de Bronze, Kelly falló en el primer intento, pero superó a Frohms en el segundo. La jugadora del City puso el segundo en el marcador y dio a Inglaterra su primera Eurocopa.