El mallorquín Rafa Nadal, que este martes superó la primera ronda de Wimbledon ante el argentino Francisco Cerúndolo, aseguró que lo ocurrido en el partido «estaba en las quinielas» porque no ha jugado en esta superficie en tres años.

«Ha sido un partido difícil, pero era algo que esperaba, porque no he jugado en hierba en tres años y él ha jugado a un gran nivel durante mucho tiempo. Ha tenido un gran revés. Lo positivo es que he acabado el partido a un gran nivel. Ha sido un partido muy positivo para mí, pero hay mucho espacio para mejorar», explicó el manacorí en la rueda de prensa posterior al encuentro.

«Casi no me acuerdo (de cómo era la hierba). Hoy hacía viento, frío, la pelota es muy pesada, es más rápida, no está mucho tiempo en las cuerdas. No ha sido fácil jugar. Durante dos sets y la rotura lo tenía bajo control. Cada victoria ayuda, he pasado mucho tiempo en pista y espero que todo esto ayude», argumentó.

Sobre la adaptación a la hierba, Nadal destacó que moverse sin limitación es lo más importante: «Más allá de eso, hay margen de mejora sin ninguna duda, lo que ha pasado hoy estaba dentro de las quinielas. Me he encontrado con un rival que ha jugado a un nivel muy alto. Te daba muy poco margen con mucha precisión».

«Ha habido momentos que me he equivocado en no entender qué tiro tenía que escoger. Eso te lo dan los partidos. Hay que tener la humildad hoy de saber sufrir», concluyó.