No fue el regreso soñado por culpa de la goleada, pero si hubo una ganadora en la final de la Supercopa además del Barcelona esa fue Virginia Torrecilla. La jugadora del Atlético volvió a sentirse futbolista casi dos años después de que se le detectara un tumor cerebral. Su salto al césped de Las Rozas fue celebrado por ambos equipos. Fueron apenas cinco minutos, pero después de dos años le supieron a gloria: "Esto acaba de empezar y espero que todo lo que venga ahora sea para arriba".

En mayo de 2020, la internacional española heló el corazón del deporte español al anunciar en las redes sociales que le acababan de extirpar un tumor cerebral. Unos dolores de cabeza durante una concentración con la selección española en Estados Unidos hicieron saltar las alarmas y tras varias semanas de pruebas le detectaron el tumor, rápidamente extirpado. Su club hizo el anuncio, pero ella apenas tardó unos minutos en celebrar en las redes sociales que acababa de ganar el partido más importante de su vida.

En todo este tiempo, la futbolista colchonera ha ido mostrando su evolución, haciendo siempre gala de una fuerza y un optimismo que sin duda han hecho más emotivo su regreso. En las semifinales de la Supercopa entró en la convocatoria, aunque lo ajustado del marcador le impidió saltar al campo. En la final, con todo resuelto, llegó su momento.

La grada pidió su participación

El campo de Las Rozas coreaba su nombre pidiendo a Óscar Fernández que le hiciera salir al campo. Mientras esperaba en la banda a que el juego se detuviera para ingresar en el césped, jugadoras y miembros del staff del banquillo del Barça se acercaban a abrazarla y darle la enhorabuena por un momento tan importante. Ingresó en el rectángulo recibiendo la ovación del público y sentidos aplausos de sus compañeras y rivales. Los abrazos con sus compañeras de selección ya se habían sucedido durante el calentamiento. Martens marcó el sexto justo antes de que saliera y el séptimo justo después, pero eso era ya lo de menos.

"Personalmente tengo a Virginia como si fuera mi familia. La conozco desde hace muchos años. Lo ha pasado muy mal y ya le he dicho que a partir de ahora todo será muy bonito. Solo podemos alegrarnos por ella", celebró emocionada la capitana del Barça, Alexia Putellas, que se sumó al manteo que recibió Torrecilla tras el partido, primero por parte de un equipo y luego del otro.

"Es una sabor agridulce por el resultado, pero estoy muy feliz por volver después de casi dos años. No ha sido la vuelta de mis sueños, pero estoy supercontenta de estar aquí y orgullosa de mi equipo. Lo hemos intentado hasta el final, pero el Barça es el mejor equipo del mundo y lo demuestra cada día", valoró Torrecilla, muy agradecida por las muestras de cariño de sus rivales: "Tengo muchas amigas en el Barça, creo que en la selección hacemos mucha piña para todo. El fútbol ha estado siempre conmigo, las compañeras han estado siempre en contacto. Le estoy muy agradecida al Barça por todo lo que han hecho por mí".