La Federació de Fútbol de les Illes Balears (FFIB), que preside Miquel Bestard, se comprometió ayer a ayudar a los árbitros del comité territorial para erradicar la violencia en los campos, después de que la semana pasada un aficionado entrara al terreno de juego en el partido Collerense-Rotlet Molinar con una navaja con la intención de agredir a un árbitro asistente.

Este compromiso se produjo durante la reunión celebrada ayer en la sede de la Federación entre el presidente Bestard; el máximo mandatario de los árbitros de Balears, Riera Morro; el representante de los árbitros Juan Antonio Lobón; el secretario del Comité de Árbitros Salvador Forné; y Llorenç Salvà, asesor jurídico de la Federación. Esta revisará el código disciplinario y ofrecerá conferencias cíclicas con árbitros y clubes.