La luchadora mallorquina Graciela Sánchez cayó ayer eliminada en la primera ronda del Preolímpico de Budapest y se despide de sus primeras opciones de lograr una plaza para Tokio. Sánchez, en 57 kilos, cayó por 4-0 ante la húngara Barka, pero tendrá una nueva oportunidad en mayo. Misma suerte corrieron sus compañeras del combinado nacional. Marina Rueda (53 kg) perdió por 4-0 ante Orshush y Lydia Pérez (62 kg) perdió por 2-1 ante Esanu, de Macedonia, en cuartos.