"Mi situación es una radiografía de lo que realmente es el Atlético Baleares. La verdad solo tiene un camino y la voy a decir yo que es quien lo ha sufrido". Juan Carlos Sánchez, el hasta ayer uno de los porteros del Atlético Baleares, ha explotado duramente contra la gestión del club, a la que califica como de "Regional" y acusa al conjunto blanquiazul de actuar "por impulsos" y no atreverse a decirle "la verdad a la cara", ha explicado esta mañana en una entrevista concedida a Radio Calvià.

El guardameta, visiblemente molesto, ha señalado que tras la derrota contra el Poblense empezó "la hecatombe". "Venía a mi isla como un sueño y se ha convertido en una pesadilla. Llegué como un fichaje importante y me hicieron capitán. El equipo empezó con una de cal y otra de arena. Estoy en la dinámica del equipo y estoy bien excepto en dos partidos, ante el Navalcarnero y el Poblense. Ahí es cuando empieza la hecatombe. La derrota en el derbi sentó mal en el club. Ese día, en el primer gol no estoy bien, nos empataron y acabamos perdiendo el partido. El entrenador nos dio una charla diciendo que el club confiaba ciegamente en él y que si tenía que echar a diez lo iba a hacer", ha rememorado.

Tras el las fiestas navideñas, Juan Carlos explica que Jordi Roger le comunicó que su rol en el equipo iba a cambiar y que jugaría Xavi Ginard. "Después del parón de Navidad es cuando empieza todo. Cuando te envuelves y rodeas de gente mediocre y medias verdades al final se convierte en un mensaje vacío, porque no te dicen la verdad ni te son directos. El día 3 de enero mensaje el míster me dijo que mi rol iba a cambiar, que no iba a jugar y que lo iba a hacer Xavi. Yo acepto la decisión porque si algo tengo es que llevo muchos años en esto. Por supuesto molesta que te digan que no vas a jugar, pero es fútbol. Si te gusta que te respeten, respeta. Y como mínimo lo que tenía que hacer es respetar a Xavi, igual que él lo ha hecho cuando no jugaba", ha explicado.

En este punto, el calvianer ha criticado que ni Jordi Roger ni directiva "tuvieron las narices de decirme que me querían largar". "El día 20 de enero Patrick Messow le dijo a mi agente "que agitara el mercado". Mi representante le dijo que se fuera de paseo. Yo me mantengo al margen, no tienen las narices ni míster ni club de decirme que me quieren largar. Actúan por impulsos. Al final, al estar en una gestión de regional preferente tanto a nivel de entrenador como a nivel club… No te dicen las cosas a la cara, no tienen la valentía suficiente como para decirte la verdad", ha apuntado.

El momento más duro fue cuando se enteró del fichaje de René Román por el Baleares "a través de un periodista y un amigo en común". El jugador acusa de "falta de profesionalidad2 al club. "Llega el día 27 y por un periodista y por un amigo en común de René me entero que ha firmado por el Atlético Baleares después de haber jugado contra el Getafe. Me parece una más del club en el que he militado hasta hoy, por llamarlo de algún nombre. Día 28 recibo un mensaje del director deportivo pidiéndome hablar con él. Yo ya directamente ya delegué en mi agente para solucionar el problema. Toda la gestión de este mes, y como se han manejado club y entrenador, te dice mucho de realmente cómo son. No como personas, sino por profesionalidad. Es un club que está a años luz de lo que es el fútbol profesional"

"Es un club que está a años luz de lo que es el fútbol profesional. Espero que aprendan de estas situaciones, pero no creo que lo hagan porque son muy cazurros y muy burros"

Si en un aspecto si ha hablado bien de la directiva del Atlético Baleares ha sido en la gestión de su liquidación de contrato. "El día 28 en la rescisión fueron muy honestos y prácticos y en ese aspecto se han portado bien. Es la única parte en la que puedo hablar bien del club. Ha sido todo muy rápido Han querido cortar y buscar responsables de la situación del club. Es entendible, forma parte del fútbol. Esta ha sido la historia de Juan Carlos en el Atlético Baleares", ha incidido.

"A partir de hoy, desearle toda la suerte del mundo a mis compañeros porque se lo merecen. Y como club no le deseo ni lo bueno ni lo malo. Espero que aprendan de estas situaciones, se lo dije, pero no creo que lo hagan porque son muy cazurros y muy burros. Por fuera parece un caramelo muy bonito, pero por dentro hay mucho desconocimiento. Decir que está podrido sería demasiado, pero hay un desconocimiento muy grande", ha añadido.

Sobre su futuro, ha informado de que entrenará con el Poblense "para no perder la forma" y que en verano tomará una decisión. "Duro es estar en el paro con la que está cayendo. Esto son cosas que pasan en el mundo del fútbol. Al ser de aquí le llega más a la gente que te rodea y es donde me afecta más, pero voy a seguir llevando a mi hijo al cole con la cabeza bien alta. Voy a disfrutar de mi isla estos cuatro meses, voy a seguir entrenando con el Poblense por la tarde para no perder la forma. En verano tomaré la decisión que tenga que tomar", ha concluido.