El tempranero gol materializado por Aitor Pons a los tres minutos de partido y el juego, rayando la perfección, que ofreció el Poblense en los primeros 45 minutos hacían presagiar que por fin llegaría la primera victoria de la temporada para el conjunto que dirige Óscar Troya. Pero dos pequeñas faltas de concentración, cuando ya acusaban el esfuerzo los pilares del equipo, privaron injustamente a los azulgrana de anotarse el triunfo.

Un Poblense seguro y sin fisuras en defensa, bien posicionado en el centro del campo y peligroso en sus llegadas al área madrileña, no dejaba maniobrar al equipo dirigido por Raúl González, que se mostraba visiblemente preocupado en su área técnica. El gol de Aitor, en un preciso pase en profundidad de Dani Benítez, amedrentó a los canteranos del Real Madrid, que apenas inquietaron la portería de Imanol, a excepción de un falta de Arribas que dio en la cepa del poste.

Antes, Jaime Hernández había obligado al meta madridista a una fenomenal intervención para desviarle, con apuros, un remate de cabeza. El mismo Jaime dispuso, antes del descanso, de otras dos claras ocasiones. 

No cambió el decorado en la reanudación. El Poblense tomó de nuevo las riendas, presionando arriba y buscando la portería adversaria, basándose en la perfecta visión y distribución de juego de Dani Benítez. Mientras, la defensa seguía firme y ordenada.

No llegaba, pese a la insistencia del Poblense, el gol que aumentara distancias y por el contrario, en una jugada que pilló descolada a la defensa, llegó el empate, obra de Hugo Duro. Cuatro minutos más tarde, un potente y certero testarazo de Alberto, a centro pasado de Jaime Hernández, volvía a poner a los blaugrana en ventaja.

El jarro de agua fría llegaría en el minuto 82, en uno de los escasos disparos a puerta visitantes, que no atajó Imanol y que aprovechó Arribas para sellar el 2-2 definitivo.