La plantilla y el cuerpo técnico del Palma Futsal se someterán este jueves a un exhaustivo reconocimiento médico en el Hospital Quirón salud Palmaplanas. El reconocimiento médico correrá a cargo de uno de los médicos del club, Jordi Alomar, que ha sido uno de los médicos que durante estos dos meses ha luchado en primera línea con los enfermos por la Covid-19. El reconocimiento médico incluirá el test para detectar si se hubiera contagiado alguno de los miembros de la plantilla, cuerpo técnico o del personal que trabajará diariamente con los jugadores cuando se reanuden los entrenamientos en el pabellón, algo que podría suceder a partir del próximo lunes. Si Mallorca accede a partir del lunes a la fase 2, el Palma Futsal ya podrá acceder a entrenar en un pabellón aunque tendrá que seguir con entrenamientos individuales. A la espera de que esté disponible el pabellón de Son Moix, que actualmente está destinado a causas sanitarias y sociales, la plantilla entrenará en el pabellón de Son Rapinya, en Palma.

Lo hará con las mismas medidas de seguridad con las que ya entrena al aire libre en la pista de atletismo. Por tanto, todavía no habrá contacto entre los jugadores pero el club entiende que el riesgo ya es mayor al tratarse de un espacio cerrado y por eso es ahora cuando toca pasar el reconocimiento médico y someter a la plantilla a los test para detectar posibles positivos por Covid-19.

Test serológico en sangre

Los jugadores del Palma Futsal se someterán a un test de detección del coronavirus dentro del reconocimiento médico que realizarán este jueves en el centro hospitalario. El test recomendado por los servicios médicos es el test serológico en sangre para mirar los anticuerpos totales por quimioluminiscencia. Los resultados se tendrán en 24 horas. Si alguno diera positivo se ampliarían los estudios con una prueba específica por técnicas de Elisa, un test que también se realiza con un análisis de sangre y que también es muy fiable para saber si han estado en contacto o si pudieran estar en fase activa de la Covid-19.

El hecho de que el equipo entrene al aire libre, sin contacto alguno, hace que no tuviera sentido pasar un control anteriormente ya que se podría haber producido un contagio en cualquier ámbito de la vida cotidiana de un jugador o el cuerpo técnico días después de pasar el control y en ese caso habría sido un problema ya que no se habría detectado dicho positivo. Dado que los entrenamientos han sido al aire libre y con todas las medidas de seguridad establecidas en el protocolo del Consejo Superior de Deportes y como marcan las ordenanzas del Ministerio de Sanidad, la apuesta más adecuada desde el punto de vista médico es someter a la plantilla a los test antes de que se entre a entrenar en un pabellón. Los test se pasan por prescripción médica y en el marco del acuerdo sanitario que el club tiene con el Hospital Quirónsalud Palmaplanas cuyos profesionales asesoran y cuidan de los jugadores del conjunto balear.

Raúl Campos y Lolo, con los alumnos del colegio Sant Antoni de Portmany

Uno de los problemas que ha supuesto la pandemia del coronavirus es parar toda la actividad presencial que general el club cada semana. Uno de los aspectos más importantes son las visitas escolares que la plantilla realiza dos veces por semana o, desde esta temporada, el 'Palma Futsal on Tour by Bricomart' con la que el club recorre la geografía mallorquina. Toca adaptarse a la nueva realidad y a la situación actual y es lo que han hecho Raúl Campos y Lolo, que este miércoles han compartido una charla con 26 alumnos del CEIP Sant Antoni de Portmany de Ibiza. Los alumnos realizan un proyecto titulado "Cómo ha evolucionado el deporte a lo largo del tiempo" y justo en este momento estaban estudiando la vida del deportista de élite. Los dos jugadores del Palma Futsal, que cuenta con una trayectoria contrastada, han sido los protagonistas para ayudar a los alumnos en base a su experiencia con una charla sobre todos los aspectos que rodean el deportista de élite y los más importantes para su rendimiento.