El presidente del comité organizador de la Copa del Rey Mapfre de vela, Emerico Fuster, ha asegurado que la regata, uno de los grandes eventos náuticos del Mediterráneo, se celebrará el próximo mes de agosto en la Bahía de Palma, "solo si hay garantías sanitarias". "Somos cautos sobre la posibilidad de que, finalmente, la flota (1.500 regatistas de 126 países distribuidos en 132 equipos) pueda navegar, pero si es viable, lo hará bajo estrictas medidas de seguridad", ha dicho Fuster.

En la edición del pasado año compitieron 11 clases, entre ellas, ClubSwan 50 en la que navegó el rey Felipe VI a bordo del barco de la Armada Española "Aifos 500". El presidente del Real Club Náutico de Palma (RCNP), anfitrión de la regata, admite que la situación planteada por la pandemia del coronavirus "es complicada", aunque mantiene sus "ganas" de que se celebre en las fechas previstas. "La semana que viene tenemos que poner una fecha tope para tomar una decisión. La Copa del Rey nunca se ha suspendido en sus 38 ediciones y todavía soy optimista. Pediré a la Federación Española de Vela y al Consejo Superior de Deportes que nos digan de qué manera se puede celebrar y si es viable mantenerla en el calendario internacional de regatas".

Fuster ha explicado que también se reunirá con la dirección de la empresa patrocinadora de la regata, Mapfre, para saber "cuáles son sus sensaciones" ante la compleja situación sanitaria que se vive en estos momentos.

La Copa del Rey Mapfre aporta 17,5 millones de euros a la economía de Mallorca durante el desarrollo de las pruebas, según un estudio de la Universidad de les Illes Balears (UIB). "Hablé con Mapfre hace casi un mes y tanto ellos como yo estábamos dispuestos a que la competición se celebrara; ahora prima la cautela porque todo es un 'puzzle' de difícil situación en el que intervienen diversos factores que afectan a la regata, como los viajes por avión, el alojamiento hotelero, la restauración", ha indicado.

En todo caso, si la Copa del Rey Mapfre se celebra en agosto, "será muy distinta a todo lo que hemos conocido", según Fuster. "La verdad es que no siquiera me la puedo imaginar", ha admitido. "En los días de regata entran cada día, y por tres accesos distintos, unas 3.000 personas al Club Náutico de Palma. Esto nos creará un caos sanitario porque son cifras que ponen la piel de gallina".

Fuster ha dicho, asimismo, que el club que preside ya ha puesto en marcha los protocolos de seguridad sanitaria impuesto por las autoridades. "Abrimos el club esta semana y ya tenemos permitido el acceso a las embarcaciones y a la navegación deportiva, eso sí, siempre cumpliendo con la normativa de la Autoridad Portuaria y manteniendo un estricto control en cuanto a entradas y salidas en muelle; deben volver a puerto el mismo día, no se pueden alejar más allá de 12 millas y tienen que navegar en el mismo municipio", ha indicado Emerico Fuster.