El preparador físico del Mallorca Dani Pastor anunció ayer que los jugadores empezarán a trabajar en grupos de cinco por videollamadas a la espera de reanudar las sesiones de entrenamientos recomendadas en el protocolo de vuelta a la normalidad de LaLiga.

Los futbolistas encadenan tres semanas de trabajo en sus casas tras la paralización del campeonato en la jornada 27 de Primera División por el coronavirus. El regreso a los entrenamientos será de forma pausada, con sesiones en solitario, para pasar después a los ejercicios en el campo en grupos de tres a ocho jugadores. Se guardarán las distancias en el vestuario hasta llegar a la fase de los ejercicios colectivos de toda la plantilla.

Pastor afirmó ayer en los medios del club que el protocolo de vuelta a la normalidad de LaLiga plantea "exigencias a nivel de medios y de infraestructura enormes". "Desconozco si todo se va a poder llevar a cabo y qué coste supondrá, pero está bien como punto de partida", señaló. El andaluz destaca que el club "ya había previsto" que los futbolistas llegaran al entreno de manera individual y entrenaran "en pequeños grupos de dos jugadores por campo, por ejemplo". "Pero bueno, eso, de momento, queda lejos, por ahora vamos a empezar a con grupos de cinco jugadores por videollamada para ver cómo trabajan", explicó.

Según Pastor, tras comprobar que la situación de cuarentena iba para largo, decidió utilizar las bandas que los jugadores se ponen en el pecho para medir la variabilidad de frecuencia cardíaca. "Es un indicador que mide el reposo, el descanso y la carga de estrés que tiene el jugador. Son datos que se envían a un programa informático que tenemos. Me puse en contacto con la empresa que tiene el software y vimos que era posible que cada jugador tuviera esta banda en casa y registrar en una 'app' todo el trabajo que iban haciendo", remarcó. "Cada vez que el jugador va a realizar una actividad física que le hemos indicado abre la aplicación que tiene en su móvil, se pone la banda en el pecho y activa el pulsómetro. Una vez concluye el entrenamiento, el jugador y yo recibimos al instante un informe detallado con todos los datos de esa actividad física". El preparador físico insistió en que con esa información no pretende saber si los jugadores han hecho o no los ejercicios. "Están comprometidos", dijo.