Rafel Nadal, ganador de 19 torneos Grand Slams, aseguró ayer que a estas alturas de su carrera el número uno del ranquin no es una prioridad, aunque si lo alcanza lo disfruta. "Mi objetivo no puede ser el número uno, si se me presenta la oportunidad como el año pasado, fantástico, pero estoy una época en la que mi prioridad es estar competitivo el máximo tiempo posible y alargar mi carrera lo máximo", señaló el de Manacor, que el martes venció al conquense Pablo Andújar por un claro 6-3 y 6-2 en su debut en el Abierto Mexicano de Tenis, torneo 500 de la ATP que se juega en Acapulco y que de ganar el mallorquín podría hacerle regresar el número uno de la lista mundial.

El primer favorito del torneo mexicano reconoció que a sus 33 años lleva un calendario conservador acorde a las necesidades de su cuerpo y de su vida personal y su felicidad. "Intento jugar donde me hace feliz y tengo mejores opciones de disfrutar y de jugar bien", observó.

Nadal, que esta pasada madrugada se enfrentaba al serbio de 20 años Miomir Kecmanovic, admitió que después de unas semanas sin competir, la primera ronda es incómoda. "Intento mejorar cada día, cada vez que salgo a la pista trato de ser el mejor, no en particular en este torneo, sino donde compito; a veces me sale mejor, otras peor. Voy a intentar hacerlo lo mejor posible mañana", agregó el jugador mallorquín.