El control de marcas del pasado sábado no fue tan fructífero como la pasada semana en Salamanca, pero una cosa quedó evidente y es la de que Esperanza Cladera (Speed Club), entrenada por Juan Sancha, está en el buen camino y es la gran esperanza del atletismo español en velocidad.

El sábado, con gran autoridad y sin que nadie le pisara los talones, certificó 7.73 en 60 metros lisos y 24.93 en los 200 metros. El primer registro refrendaba la mínima de Salamanca y el segundo demuestra la facilidad con que baja de los 25 segundos.

Aina Mascaró (Siurell), especialista en pruebas combinadas, lanzó el peso de 3 kilos a 11’42 metros, que también es mínima sub-20. Además, corrió los 800 metros con 2:29.36 y saltó 1’56 en altura, que es una buena marca y significa que está en buenas condiciones para medallas y campeonatos. Teresa Ribas (Speed), con la marca de 1:40.95, firmaba una mínima sub-16.

En 200 metros hubo buenos tiempos, ganando Manu Ramírez con 22.53 y Miki Esteller (Diana) fue cuarto con 22:74, que es mínima sub-18.

En salto de longitud destacaron el decatleta David Abrines con un salto de 6’73 metros y Guillermo Isern (Siurell) saltando 1’80 en altura. Mínimas máster obtuvieron los representantes del Badia de Palma Víctor Moreno con 24.51, Joan Puigserver con 25.17 y Matías Bennassar con 25.41; y Ángel Sánchez en disco de un kilo lanzó a 35’75 metros.

Más mínimas en Sabadell

En Sabadell, Adrián Calvo demostró estar por el buen camino al firmar un tiempo de 4:01.26 en 1.500 metros, que es mínima nacional sub-20. También estuvieron los representantes del Siurell Santi Llamas y Sergi Isern, que certificaron unos cronos de 2:06 y 2:01 respectivamente.