Con los incidentes del Campos-Penya Arrabal todavía demasiado recientes, se suma ahora una nueva agresión, condenada por el Santa Ponça CF, sobre uno de sus jugadores de la categoría cadete. Según indicó este pasado lunes el club calvianer, "este fin de semana nuestro jugador cadete Adrián Muñoz García recibía una brutal e injustificada agresión por parte de un rival del Cala D'Or.

Desde el club condenan "enérgicamente esta salvajada" y esperan "que recaiga una dura sanción al agresor tanto por parte del club como de la Federació de Futbol de les Illes Balears". Según señalan desde la entidad calvianera, "se ha denunciado el caso ante las autoridades".

"Nos quedamos todos helados ya que no nos creíamos lo que veíamos", explicó ayer a DIARIO de MALLORCA el presidente del Santa Ponça, Quique Garrido. "Faltaban diez minutos para finalizar el partido y perdíamos 1-5; es decir, el partido estaba resuelto. En un balón largo que se perdía por la banda uno de nuestros chicos fue a por la pelota y uno del Cala d'Or protegía el esférico. Sin mediar palabra se giró y empezó a pegarle patadas, incluso desde el suelo", relató.

"Enseguida (el domingo) trasladamos al chico nuestro al centro médico de aquí y le dieron el alta al cabo de unas horas. Sin embargo, al día siguiente (lunes) y ya en el colegio, el niño se encontró indispuesto y tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario, donde ha estado en observación. Se le ha dado el alta", añadió Garrido.

"El partido fue muy limpio"

"El partido fue muy limpio y no se produjo ningún roce ni nada de nada que nos pudiera hacer pensar en ese final. No sabemos qué le pudo pasar por la cabeza en esos momentos", agregó. "El fútbol se nos está yendo de las manos", sentenció.

"La familia del jugador lo ha denunciado por la vía civil y nosotros a la Federación. Decir que el Cala d'Or se ha puesto en contacto con nosotros y que se han portado muy bien, preocupándose en todo momento por nuestro futbolista", concluyó Garrido.

"Nuestro chico pidió disculpas al padre y al jugador, aunque no tiene justificación. Ha sido apartado del equipo. Lo que pasó, pasó. No nos vamos a esconder", señaló ayer Luis Miguel González, presidente del Cala d'Or, que anoche se reunía con el del Santanyí, Tomeu Estelrich, "para las medidas a adoptar, ya que el cadete es una mezcla de jugadores de los dos clubes". Está previsto que hoy emitan un comunicado.

El choque entre ambos equipos de Segunda Regional se produjo en el polideportivo de Santa Ponça, encuentro que acabó con victoria para los visitantes por un contundente 1 a 6.