El Celta, con dos goles de Iago Aspas, logró una balsámica victoria en La Cerámica para aliviar su complicada situación clasificatoria al imponerse por 1-3 al Villarreal en un encuentro en el que nadie estuvo a un buen nivel y que deja muchas dudas en los locales.

No fue un buen partido y el marcador excede a la distancia entre lo ofrecido por ambos conjuntos sobre el terreno de juego, con un castigo excesivo para los locales. Ningún equipo impuso su ley, pero el Celta aprovechó dos contras y un balón parado para llevarse los tres puntos y el Villarreal no fue capaz de confirmar su reacción tras neutralizar pronto el 0-1 a favor de los visitantes.

El conjunto gallego se queda a dos puntos de la salvación tras la derrota del Mallorca el viernes.