El Calvià mostró su rechazo a las acusaciones de insultos y supuestos saludos nazis de los que le acusa el Platges de Calvià, en un encuentro disputado el pasado fin de semana entre ambos conjuntos en categoría juvenil.

El club calvianer redactó un comunicado en el que se defiendía de las críticas surgidas. “El C.D. Calvià siempre ha mostrado su condena y repulsa a la violencia física o verbal dentro de un campo de fútbol, ya sea a nivel amateur o formativo. Precisamente se acusa al club de lo contrario sin fundamento alguno, ya que los hechos en los que se basan dichas acusaciones y tuvieron lugar el pasado fin de semana entre uno de nuestros equipos de categoría juvenil y su rival, el Playas de Calvià, se limitan a los cánticos que los jugadores y simpatizantes del C.D. Calvià dirigieron hacia la grada al finalizar el partido y que en ningún momento pretendían ser fascistas u ofensivos”.

“Los valores que el C.D. Calvià siempre ha querido transmitir en sus más de 65 años de historia son el respeto, el compañerismo, la competitividad, la diversión, el esfuerzo, la integridad, el aprendizaje y, sobre todo, el juego limpio. Este club no va a tolerar que se cuestione su honor o se pongan en duda sus valores, y se reserva el derecho a adoptar las medidas legales procedentes”, finaliza el comunicado

Por su parte, el Platges de Calvià consideró que las provocaciones surgieron por parte de los hermanos Grille, Gabriel y Fede, entrenador y delegado del Calvià, y el técnico del Infantil Alfonso Ramírez. Además, les acusaron de intimidar al fotógrafo que seguía la actualidad del club, momento que el club visitante negó. Debido a estos hechos, el Platges de Calvià optó por denunciar a Antiviolencia lo acaecido en el polémico encuentro.

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