El B the travel brand Mallorca se enfrenta esta tarde a las 18 horas al Carramimbre Valladolid en el pabellón de Son Moix con la intención de dar un paso hacia adelante ante un rival invicto. Es el partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga regular de la LEB Oro, en el que los palmesanos seguirán sin poder contar con Tomàs y Stainbrook.
Es sin duda uno de los encuentros más destacados de la jornada en el que se verán las caras el equipo local, que tiene que aprovechar la ajustada victoria de la semana pasada en Alicante para despegar definitivamente y un Valladolid que no conoce la derrota y que quiere continuar comandando la clasificación.
La asignatura pendiente de los mallorquines en este comienzo de Liga era conseguir una regularidad en el juego imprescindible para optar a las victorias y así Félix Alonso lo reconocía en la rueda de prensa del jueves. Además apuntillaba que los momentos de desconexión, que siempre se producen en un partido, tenían que ser los mínimos y que no les debían penalizar tanto y ser tan determinantes.
Resulta claro que el objetivo es ganar, pero también se hace evidente que el medio para lograrlo pasa por ser más regular. Posiblemente la victoria se producirá si el grupo no se muestra tan irregular como ha demostrado en este inicio de competición, tras caer en Oviedo y ante el Palencia en las dos primeras jornadas y vencer en el último suspiro en Alicante.
La baja de Matt Stainbrook, operado esta semana, obligará una vez más al B the travel brand a minimizar las situaciones de ataque en las que se genere juego desde el poste bajo (el jugador estadounidense es un especialista y un extraordinario asistente), a subir el ritmo de juego, a convertirse en un equipo veloz que busque jugar transiciones rápidas y que cargue el rebote ofensivo. Y por supuesto a mejorar la intensidad defensiva.
El Valladolid pasa por un momento dulce de juego y de resultados. La plantilla de los castellanos es amplia y no exenta de calidad. Encesta con facilidad y prácticamente todos los jugadores tienen la capacidad de anotar de larga distancia. Dos jugadores sobresalen: el alero Bartley y el ala pívot De la Fuente (los máximos anotadores, los que más minutos juegan, los que más tiros ejecutan y los que mejor valoración consiguen). El partido tiene que servir para que el conjunto mallorquín dé un paso firme y se consolide en una competición en la que, cumpliéndose los pronósticos, sea uno de los actores protagonistas. Es una gran oportunidad para dar un golpe sobre la mesa y mirar hacia arriba.
