David Ferrer se proclamó ayer campeón de la quinta edición de la Legends Cup que se celebra en el Palma Sports & Tennis Club. El tenista de Xàbia se impuso a Juan Carlos Ferrero en la final (7/6 y 6/3).

Por su parte, Carlos Moyà cedió en la final de consolación ante Mikhail Youzhny en tres sets (6/7, 7/6 y 10-2) finalizando el torneo en cuarta posición.

Ferrer estrena su palmarés en el circuito ATP Champions Tour imponiéndose en la cita mallorquina, la primera en la que participa después de su retirada en mayo.

"Me lo he pasado muy bien y de eso se trata, más allá de competir", declaró el alicantino tras batir a Ferrero en una hora y media de partido. El tenista de 37 años se adjudicó la primera manga por un tanteo de 7-4 en la muerte súbita.

Lejos de rendirse, Ferrero arrancó con break a su favor en el juego inicial de la segunda manga. Poco a poco Ferrer recuperó terreno con dos quiebres consecutivos en el segundo y cuarto juego (4/1).

El finalista de Roland Garros en 2013 logró mantener su ventaja hasta que cerró el partido con su servicio en el noveno juego. "Es un placer jugar contra Juan Carlos (Ferrero). Ya me gustaría estar tan bien físicamente a su edad", elogió Ferrer sobre su rival.

Carlos Moyà tuvo en su mano el duelo por el tercer y cuarto puesto de la Legends Cup. El exnúmero uno del mundo dispuso de punto de partido para batir a Youzhny en el duodécimo juego del segundo set.

Moyà se adjudicó el primer set en el desempate (7-5) tras 48 minutos tras levantar un break abajo en el séptimo juego. En la segunda manga también dominaba el ruso (2/4). El palmesano recuperó su servicio en el décimo juego y se llegó de nuevo al tie-break.

Youzhny puso una marcha más tras salvar el match point. Se adjudicó la muerte súbita del segundo set (7-4) y logró mantener la inercia en el super tie-break del tercer set (10-2).

"Youznhy ha hecho un gran partido y al final se notó la diferencia de edad. Es un placer que mi familia y amigos estén también aquí después de tantos años", concluyó Moyà al final del partido de consolación.