Dice no tener una espinita clavada por su octava posición en los Juegos de Río, pero cuando Mario Mola habla de Olimpiadas es incapaz de evitar que se le ilumine la mirada. El tres veces campeón del mundo de triatlón quiere afrontar "en las mejores condiciones posibles" el curso que entra. "Mi ilusión es luchar por las medallas en Tokio", reconoce ambicioso, "y sin duda las Series Mundiales son la mejor preparación".

No ha sido un año fácil para el deportista mallorquín. Su segundo puesto en el World Triathlon Series, tras tres años de dominio absoluto, deja un sabor agridulce. "Quizás venía malacostumbrado de los últimos años en los que no había sufrido ningún impedimento. Cuando lo tienes lo pasas mal porque quieres rendir siempre al mismo nivel. Hay que ser conscientes de que lo que me ha pasado esta temporada es lo más normal del mundo y que cuando he podido competir, creo que lo he hecho de la mejor forma", reconocía este mediodía el calvianer, quien sufrió una sobrecarga en isquios y espaldas a mitad de temporada que le impidió rendir durante todo el curso al 100%.

"De todo esto he sacado un aprendizaje que no hubiera podido extraer de otra forma", admite el calvianer: "Si a mitad de temporada me hubieran dicho que en la última prueba estaba en condiciones de luchar por el Mundial, no me lo habría ni imaginado, así que la valoración tiene que ser positiva". Y es que, pese a las dificultades, Mola luchó hasta la última prueba por hacerse con el primer escalón del podio. "Si te soy sincero, mi objetivo ya no era ni mucho menos tratar de conseguir el Mundial. Me había preparado para Lausane y mi ilusión era hacerlo lo mejor posible, lo que estaba en mis manos. Subir o no al primer escalón dependía ya de otros factores, por ejemplo de que un compañero de entrenamientos fallara, y eso no me hacía ilusión ni mucho menos", reconocía sincero el mallorquín.

Durante los próximos seis fines de semana, Mola competirá en cuatro de ellos "para intentar alargar el curso lo máximo posible". "Si paro ya y empiezo el trabajo de pretemporada demasiado pronto, me puedo quemar antes de hora y mi intención es intentar llegar al 100% al mes de julio", momento en el que afrontará unas Olimpiadas paras las que ya está clasificado. "Al conseguir la segunda posición en Lausane logré de forma automática la clasificación para Tokio. La segunda plaza será designada por ranking y la tercera queda a criterio del seleccionador. Si las cosa no cambian mucho, lo lógico sería que, tanto Fernando Alarza como Javier Gómez Noya, tengan también su huevo en los Juegos", descubrió el triatleta.

Mola reconoció que afrontar un curso con Olimpiadas "siempre es un pelín diferente porque es la prueba por excelencia del año" y "uno no puede hacer una temporada fantástica si luego en los Juegos hace una mala carrera. Es lo que la gente va a recordar". "Tokio será la prueba que prepararemos con más mimo y ganas, pero no hay que olvidar que tampoco estamos acostumbrados a entrenar ocho o nueve meses solo para una carrera. Voy a aprovechar las Series Mundiales como preparación, sin volverme loco en cuanto al calendario", reconoció el de Calvià. "Todo está en juego en un día en el que has podido dormir más o menos, sentirte mejor o peor. En Río hice todo lo que pude, me vacié en carrera, pero hubo siete personas que fueron mejores que yo. Siempre quiero salir a ganar y estar en el podio, pero también tengo claro que no siempre es posible", zanjó el triatleta.