Joan Lluís Pons no se ha mordido la lengua y no ha dudado a la hora de cargar contra los responsables de la Federación Española de Natación después de haber logrado la cuarta plaza en los 400 estilos en los Mundiales de Gwangju (Corea del Sur). Preguntado acerca de si se consideraba un referente de la natación nacional, el mallorquín ha sido claro. "Quizás lo soy, pero no se tiene muy en cuenta. Estoy disgustado. Creo que este año se nos ha dejado muy de lado a todos los que no somos del grupo de fondo, donde están Mireia Belmonte y Jimena Pérez. He ido a competiciones sin biomecánico ni fisioterapeuta. De hecho, no han venido aquí. Había programado una concentración en altura y la Federación Española no nos dejó hacerla. Con el apoyo del CN Sant Andreu al menos he llamado la atención con mi marca y mi puesto", ha argumentado en declaraciones recogidas por el diario As.

Pons, que batió su propio récord de España y luchó por el bronce hasta el final en los 400 estilos, aunque finalmente sus 4:13.30 no fueron suficientes, posee un palmarés que ya infunde mucho respeto. Es finalista olímpico en los Juegos de Río, medalla de bronce en el Europeo y, tras su concurso en Corea del Sur, cuarto del mundo. Pons ya tenía en su poder el récord nacional desde los Juegos de Río de Janeiro (4:13.55), pero lo pudo rebajar en su primera final de un Mundial.

El nadador del CN Sant Andreu mantuvo la sexta plaza durante los parciales de mariposa y espalda, empezó a recortar en el 100 de braza y estuvo explosivo en el crol. El oro fue para el japonés Daiya Seto con 4:08.95 por delante del estadounidense Jay Litherland (4:09.22) y del neozelandés Lewis Clareburt (4:12.07).

El solleric es consciente de que sus palabras pueden tener repercusión. "Espero que recapaciten y vean que esta no es la manera de llevar las cosas. Ha sido un Mundial difícil y la gente se ha dejado la vida en la piscina. Somos muy profesionales, pero a veces nos ha faltado ser más un equipo. Y empezar el Mundial con una entrevista del jefe de equipo que pone a parir a parte de la gente no ayuda a nuestro ánimos...", ha comentado, en referencia a unas declaraciones de Fred Vergnoux en El País. "Creo que todos sabemos reflexionar y de cara a Tokio podemos encararlo mucho mejor", ha zanjado la polémica.

El solleric tiene previsto regresar a la isla el 8 de agosto. Antes estará en Tokio hasta el próximo lunes para participar en la prueba de la Copa del Mundo y, después, el 6 y 7 competirá en los Nacionales de verano. Después ya podrá descansar unas semanas junto a los suyos antes de volver al trabajo de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020, donde tendrá la oportunidad de volver a hacer historia. Está claro que va en el buen camino.