Con los ánimos renovados tras eliminar al Melilla, el Atlético Baleares afronta esta tarde (18:45 horas / IB3 Tv) el partido de la ida de la tercera y definitiva eliminatoria por el ascenso a Segunda División. Para bien o para mal, la temporada del conjunto blanquiazul toca a su fin y el Mirandés es la última piedra con la que se toparán en el camino.

El Atlético Baleares está a 180 minutos de acabar con una historia que dista 56 años desde su última aparición en la Segunda División. Enfrente el Mirandés quiere colgarse la etiqueta de verdugo de los campeones de grupo como ya hizo contra el Recreativo de Huelva en la última eliminatoria.

"El fútbol no suele devolverte nada", reconoció Manix Mandiola, técnico blanquiazul, en la previa del encuentro ante el conjunto burgalés. El vasco hacía referencia a la eliminatoria que ya afrontaron ambos equipos, allá por 2012, y que se decantó del lado del equipo peninsular. Con ánimo o no de revancha, el Baleares peleará esta tarde por encaminar la ronda y noquear a un rival que dista mucho del que cayó hace ahora un año ante el Real Mallorca.

Treinta y ocho jornadas y dos eliminatorias de play-off han acabado pasando factura a la reducida plantilla del conjunto blanquiazul. Las heridas abiertas en la zaga se han cobrado su última víctima en la figura de Rubén. El defensa balearico no podrá ayudar al equipo en el trascendental encuentro en Miranda de Ebro. Una sobrecarga muscular en el gemelo obligará a Manix Mandiola, una vez más, a ejercer de malabarista para confeccionar el once más importante del curso.

A la ya conocida ausencia por lesión de Kike López, el eibarrés saltará al césped de Anduva con una zaga formada por Álvaro Vega en banda diestra, Peris en la izquierda y Villapalos y Vallori en el eje central. Por delante no se espera ninguna novedad, con la presencia de Nuha Marong en la punta de ataque y escoltado por Canario y Samuel en ambos lados. Por su parte, el Mirandés aterriza en la última eliminatoria de los play-off por el ascenso con la moral por las nubes tras remontar al Atlético de Madrid B y eliminar al Recreativo de Huelva. Los de Miranda de Ebro se han caracterizado durante todo el año por ser un conjunto muy sólido en su estadio. El dominio de las jugadas a balón parado, con muy buenos lanzadores, les ha servido durante todo el curso para hacerse fuertes en casa.

Mantener la portería a cero es el primer reto del Atlético Balares, ganar sería un lujo.