Rafel Nadal apareció en la abarrotada sala de prensa de Roland Garros tres horas después de tumbarse sobre la tierra de la Philippe Chatrier, sereno, tranquilo y satisfecho junto a la copa de los mosqueteros que se encontraba sobre la mesa. Y pasó a repasar las dificultades que ha tenido que pasar en el último año y el bajón que le pegó tras no poder disputar la semifinal de Indian Wells ante Roger Federer. "Tras Indian Wells perdí energía, física y mentalmente. Con el equipo, la familia y mi fuerza para seguir adelante se ha podido revertir una situación complicada en los últimos cuatro meses", confesó el mallorquín.

Explicó después las sensaciones que vivió ayer con su primera victoria en 2005 ante Mariano Puerta: "Son sensaciones diferentes, igual que mi vida. El primero fue muy emocionante porque era el primero y pensaba que tenía muchos años por delante para intentar ganar más títulos. El de hoy (por ayer) es importante por ganar a estas alturas de mi carrera, con 33 años", dijo.

Nadal definió su año como "complicado" en término de lesiones. "Cuando te llevas tantas bofetadas quedas herido. Mejoré en pequeñas cosas. Ya dije en Madrid que no creo en los avances mágicos. Lo importante es sentirte mejor a cada partido que disputas, a cada semana que pasas".

Respecto a si el esfuerzo que tuvo que hacer Thiem al tener que disputar su partido de semifinales a cinco sets en dos días le pudo afectar, Nadal no quiso entrar: "Es una pregunta que la deberías hacer a Thiem. No lo sé".

En cuanto al partido, Nadal explicó qué cambió tras el empate a un set. "Necesitaba pensar, a parte de ir al baño. En el segundo set el partido no estaba en mis manos. En su primera bola yo estaba en situación de desventaja. Me centré en eso". Y cuando se tiró sobre la tierra tras enviar Thiem la pelota fuera, dijo: "No pienso en nada. Te viene el bajón. Ganar doce veces aquí es muy complicado".

Nadal se coloca a dos títulos de Federer, algo que al mallorquín le "motiva", pero no le "obsesiona". "No es una referencia en mi carrera. No me levanto cada día para eso, no es mi forma de entender el deporte. No me cambiará para nada mi futuro si igualo a Federer o Djokovic me supera. Valoro más ganar doce veces aquí que cualquier estadística", concluyó el campeón de Manacor.

Por su parte, Francis Roig, entrenador de Nadal junto a Moyá destacó que el manacorí "ha dado una lección ante un rival brutal en tierra, que te hace sentir siempre incómodo. Rafa ha hecho una lectura muy buena, ha ido cambiando de táctica y ha ganado con el revés, alto, cruzado, paralelo. En el segundo set Thiem ha sacado mucho mejor. Ha estado muy igualado y los dos primeros puntos del tercer set ha recuperado la intensidad y se ha metido en la pista".

Roig valora que Nadal "es capaz de reinventarse. Pocas cosas me sorprenden de él. Tiene ganas de seguir ganando porque tiene pasión por su deporte. Lo suyo tiene más mérito que Djokovic y Federer por sus lesiones".

Por su parte, Toni Nadal dijo que vio ganar a Borg seis veces "y pensaba que era un monstruo. Creo que si se mantiene constante en el juego es difícil que ganen a Rafel porque sabe aguantar la tensión como nadie".