Rafel Nadal empieza a partir de las 14 horas su andaduda en su decimoquinta participación en Roland Garros, donde aspira a convertirse en el primer tenista de la historia en conquista doce veces un mismo torneo de Grand Slam. Hasta ahora, comparte once títulos con la australiana Margaret Court, quien entre 1960 y 1973 levantó el trofeo en el Abierto de Australia.

El alemán Yannick Hanfmann, de 27 años, 184 del mundo y neófito en Roland Garros, será el primer rival de Nadal en su camino hacia la duodécima Copa de Mosqueteros. El tenista, surgido de la fase previa, disputará contra el número dos del mundo su segundo duelo en un Grand Slam, tras el que jugó el año pasado en el Abierto de Estados Unidos, donde perdió contra su compatriota Philipp Kohlschreiber. Si supera ese primer obstáculo, Nadal jdisputará el segundo también contra un jugador procedente de la fase previa: el ganador del duelo entre el también alemán Yannick Maden, de 29 años y 115 del mundo, y el belga Kimmer Coppejans, 25 años y 115 del ránking.

El camino del manacorí hastas las rondas finales es relativamente asequible. En cuartos su rival puede ser el japonés Kei Nishikpori y en semifinales el suizo Roger Federer o el griego Stefanos Tsitsipas.

Nadal llega a París igualando su peor registro de títulos, uno. Anteriormente, en 2015, solo había ganado en Buenos Aires. Este año en Roma, donde por por primera vez dio muestras de estar a su mejor nivel, o muy cerca de él.

Carlos Moyá, entrenador de Nadal, reconoce que su pupilo “llegó a perder la motivación y las ganas” tras la lesión de Indian Wells, y que hace un mes ni se planteaban llegar con opciones de ganar Roland Garros. “Nunca había visto a Rafa así, y menos en la época de tierra batida. Estaba muy cabizbajo, sin motivación. Llegó a perder la ilusión y las ganas”, señala Moyá en declaraciones recogidas por la web de la ATP.

A base de diálogo, asegura el exnúmero uno en 1999, lograron recuperar al jugador, que ha tenido una progresión ascendente desde el comienzo de la gira de tierra. A Moyá le sorprendió que Nadal ganara tres partidos en Montecarlo y que su mejora se acelerara en Barcelona. “Si llega a ser Roland Garros antes de Barcelona, hace un mes, es improbable que Nadal ganase el torneo. Mi esperanza es que faltaba tiempo, y lo que ha pasado en este tiempo es algo que puede ocurrir cuando se trata de un jugador tan grande”, afirma.

El técnico asegura que le han animado “a luchar, a poner buena actitud, a dar un paso adelante”. Moyá admite que vio en “peligro” la gira de tierra, pero alaba la profesionalidad del tenista, que “reconoció que no estaba bien y se dio la oportunidad de seguir compitiendo”. “Era la única forma de salir de esta dinámica. Hizo lo que tocaba: jugar, poner buena actitud y buena cara. Parece mentira que varias semanas después tenga este nivel. Esa era mi esperanza y la de todo el equipo, que hiciera un cambio de un día para otro”, dice. Moyá explica que Nadal llega a París “en buenas condiciones”, aunque con menos partidos que en temporadas anteriores.

La jornada

Federer a Sonego 6/2, 6/2, 6/4

Tsitsipas a Marterer 6/2, 6/2, 7/6

Berrettini a Andújar 6/7, 6/4, 6/4, 6/2

Djere a Ramos 6/3, 6/2, 7/6

Dimitrov a Tipsarevic 6/3, 6/0, 3/6, 6/7, 6/4

Muguruza a Townsend 5/7, 6/2, 6/2