El Mallorca B aspira hoy a alimentar su condición de gran favorito ante el modesto Beti Kozkor navarro en la primera eliminatoria por el ascenso a Segunda B. El filial bermellón, que quedó segundo del grupo balear, juega hoy a partir de las 11 horas en el Complejo Plazaola ante la gran sorpresa de estos play-off de ascenso.

Los de Julián Robles se enfrentan al cuarto clasificado del Grupo 15, que es de una pequeña localidad de poco más de 1.500 habitantes, la más pequeña de todas las que luchan por el ascenso a la categoría de bronce, llamada Lekunberri, situada a 34 kilómetros de Pamplona.

"Llegamos en un buen momento para jugar contra un rival que tiene mucha ilusión", asegura el propio Robles, que espera que sus jóvenes pupilos muestren el excelente nivel que les ha llevado a ser subcampeón de la Tercera balear, solo por detrás del experimentado Peña Deportiva. Los mallorquines se miden a un adversario que ha hecho historia por el simple hecho de meterse en el play-off, algo que hará que hoy su campo viva una jornada especial. Este es otro de los aspectos que deben saber manejar los bermellones. De hecho, el Beti Kozkor basa su fortaleza en su efectividad como local.

Su entrenador, Rodri Fernández de Barrena, confía en las virtudes de su equipo. "El Mallorca B se ve como favorito y es evidente que lo es, pero hay que jugar en Lekunberri. Hemos jugado buenos partidos con los equipos de arriba y se lo queremos poner difícil. Hemos estado un año y pico sin perder en casa, hemos competido muy bien", recordó ayer en declaraciones al Diario Noticias de Navarra. "Estamos con mucha ilusión. No ha faltado nadie a los entrenamientos. Vamos a desayunar juntos el domingo y daremos una pautas de lo que hay que cenar el día anterior para afrontar un partido a esas horas, ya que no estamos acostumbrados", añadió. Todo un aviso para el filial, que espera regresar a la isla con un buen resultado para la vuelta en Son Bibiloni.